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22 Mar, 2023

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Las ‘netflix’ españolas

Wuaki TV, Filmotech y Filmin tratan de emular en nuestro país el éxito del negocio de cine legal a través de Internet protagonizado por la empresa californiana Netflix.

Se me ocurrió la idea de montar un portal de cine por Internet cuando vi el éxito que tenía Netflix en Estados Unidos, donde trabajaba en el sector financiero”, reconoce Jacinto Roca, fundador de Wuaki TV, uno de los tres portales de venta y alquiler de cine por Internet que intentan reproducir aquí el apabullante éxito de Netflix.

No es casual que tanto Wuaki TV como los otros dos portales, Filmin y Filmotech hayan empezado a gestarse a partir del 2007, justo cuando el modelo de negocio de Netflix empezó a convencer a los consumidores estadounidenses a pagar por algo que muchos descargaban gratis: el cine por Internet.

Despegue espectacular
Fundada en 1997 por Reed Hastings, un empresario informático, como un videoclub por Internet, Netflix enseguida empezó a coger velocidad y a sumar millones de clientes para su tarifa plana de alquiler de vídeo. De hecho, sólo le han bastado nueve años para multiplicar su cifra de suscriptores por 30, desde los 867.000 del 2001 a los 25,5 millones de junio de este año. Tan popular es su servicio que en marzo el streaming de sus vídeos supuso el el 22,2% de todo el tráfico web en EE UU.

Exportar el modelo
Creadora del sector en EE UU, Netflix ha sido uno de los fenómenos más apabullantes del Nasdaq. Después de entrar en el parqué neoyorquino en 2002, protagonizó una escalada en Bolsa, en plena crisis, que le llevó desde los 32 dólares del 2009 a los 295 de julio de este año. Y su facturación se dobló estos últimos tres años al pasar de los 1.205 millones de dólares del 2007 a los 2.162 millones del año pasado. Pero, estos últimos meses, tras anunciar en julio una subida de tarifas, la empresa ha retrocedido en el mercado bursátil.

Lo sucedido en Canadá, donde en pocos meses logró un millón y medio de suscriptores, demostró que su modelo –no igualado hasta ahora– podía muy bien funcionar fuera de Estados Unidos. Se comprobó que la piratería y las descargas ilegales podían ser vencidas, si a los potenciales usuarios se les hacía una oferta irrechazable; un catálogo casi ilimitado a cambio de una tarifa plana más que módica: ¡sólo ocho dólares! Y Netflix tendrá en los próximos meses la oportunidad de reproducir su éxito en Latinoamérica, donde iniciará su desembarco en Brasil y Argentina para luego extenderse a un total de 43 países de la zona. En este último cobrará 39 pesos (6,6 euros) por su tarifa plana.
Luego le tocará el turno a España, uno de los países del mundo más asolados por las descargas ilegales de cine (y de música), al que, según fuentes de FAPAE, llegará a principios de año.

No estará sola
Aunque la percepción del mercado es que va a arrasar, Netflix no estará sola en España. Se encontrará con rivales como Apple, que vende y alquila cine desde septiembre del 2010, la sueca Voddler y los tres portales españoles, prácticamente recién llegados al mercado. Aún cuando empezaron su gestación en el 2007, tanto Filmin como Wuaki empezaron a operar el pasado verano.

Cuestión de nichos
Voddler, que está operando ya de forma experimental en España, no será un rival fácil para Netflix. Fundada en 2005, Voddler empezó a funcionar, de hecho, cuatro años después y le bastaron seis meses para lograr casi 300.000 usuarios registrados. En el 2010 envió a sus suscriptores unos cinco millones de películas. Su secreto está en su combinación de gratuidad con pay per view (pago por visión): el 80% de sus películas pueden verse sin coste alguno, ya que llevan publicidad incorporada. Eso sí. El otro 20% es de pago.

Entre las españolas, la más veterana es Filmotech, lanzada en el 2007 por un grupo de productores de cine y que ofrece exclusivamente cine español.
Filmin, creada en 2007 por Juan Carlos Tous, un ejecutivo del mundo del cine (Filmax, Manga Films, Cameo…) nacido en Barcelona en 1961, se ha centrado desde su puesta en marcha el pasado verano en un nicho de mercado muy específico: el cine independiente y de autor. “De momento, estamos recibiendo más de 160.000 visitas al mes”, comenta Tous.

Expectativas al alza
Wuaki TV sería el proyecto más ambicioso. Lanzada al mercado el pasado julio por un grupo de ejecutivos llegados del mundo del cine, el capital riesgo y la tecnología, ha decidido centrarse en la oferta de cine comercial. “Ya vamos por los 10.000 usuarios y las 15.000 descargas. No está mal para empezar”, asegura Roca.
Por extraño que parezca, a ninguna de las tres empresas les parece mal la llegada de un competidor de la talla de Netflix. Todo lo contrario. Para el fundador de Filmin, “nos ayudará a construir un mercado y a mostrar a la gente que hay otra forma de ver cine, por Internet”. De todos modos, se cree en el sector que los suscriptores de Netflix, Wuaki o Filmin vendrán básicamente de los colectivos no habituados a descargar cine de Internet. Pero la llegada de Netflix y la puesta en marcha de los portales españoles tampoco ha sido casualidad. Coinciden en el tiempo con la aprobación de las medidas contra la piratería ilegal y la ampliación del ancho de banda, hasta hace poco insuficiente.
“Aun cuando no vaya a ser la panacea –reflexiona Tous–, la Ley Sinde realmente nos ayudará a todos. En cuanto empiecen a aprobar los reglamentos, las cosas empezarán a cambiar. Tengo mucha confianza en que también en España tendremos un sector de cine por streaming”.