Cuando Antonio Rodilla abrió su pastelería y charcutería en la madrileña plaza de Callao, en diciembre de 1939, probablemente no imaginaba que sus esponjosos sandwiches rellenos acabarían siendo mundialmente conocidos.
María Carceller, consejera delegada del Grupo Rodilla, nos habla de los inicios de la marca: “Antonio Rodilla abrió el primer establecimiento en la madrileña plaza de Callao. Inicialmente, vendía repostería, con los mejores pasteleros de Madrid, y también fiambres. Esos pasteleros son los que inventaron nuestro famoso pan inglés o pan de molde. Gracias a ese pan y su fórmula secreta, consiguieron una textura esponjosa y a la vez compacta que permite tener una gran variedad de rellenos”.
Colas por un sandwich de Rodilla
Ese pan inglés con recortes de embutido que el propio Antonio traía de su pueblo natal -Guijuelo- resultó todo un éxito, además de algo totalmente novedoso en ese momento, allá por los años cuarenta.
El secreto estaba en ese pan suave y ligero relleno que cautivó a los madrileños. Tanto, que un año más tarde, el emprendedor decidió crear un obrador en el que fabricar su propio pan de molde. La fórmula: solo unos pocos la conocen.
El segundo gran hito fue la creación de su sandwich de ensaladilla, que hoy continúa siendo la estrella en toda la cadena de restaurantes. Cuentan en la empresa que fue tal el éxito que había larguísimas colas para comprarlos. Actualmente, se venden millones al año de esta variedad.
“El primer sandwich fue el de jamón serrano, que se hacía con las puntas que sobraban de los jamones y Antonio Rodilla loncheaba. Fue un éxito. El segundo fue el superventas -de ensaladilla- que se lanzó en 1945. Gracias a ese sandwich somos mundialmente famosos y sigue siendo el número uno en ventas: cuatro millones de unidades al año”, cuenta Carceller.
En sus primeros años de andadura, Rodilla se llegó a convertir en uno de los referentes en restauración en Madrid. También se dieron cuenta de que sus clientes se querían quedar en su local y acompañar el picoteo con bebida, pero hasta 1961 no añadieron cafetería, pues la normativa no lo permitía en ese momento.
Las siguientes décadas continuaron abriendo establecimientos en las zonas más emblemáticas de la ciudad. Así fue hasta los años 70, cuando se situaron también en las concurridas calles Princesa y Orense. Durante estos años, su éxito era tal que llegaron a vender hasta ¡12.000 sándwiches diarios!
Merienda para los soldados
Hasta el ejército español hacía su pedido de 10.000 piezas para sus soldados. El sabor elegido: foie gras y queso batido. Por entonces, el precio de cada uno era de 15 pesetas.
La marca nunca dejó de innovar y de adaptarse a los tiempos para no quedarse obsoleta. Mientras el negocio seguía creciendo, la empresa dio el salto al sistema de franquicias en los años 90, con la inauguración del restaurante de Goya, en 1997. A este lo denominaron “Rodilla Win” para diferenciarlo del resto de establecimientos.
Otro salto se produjo en 2007 con la adquisición de Cafés Jamaica, Café de Indias y Cafés Garriga. La intención era seguir manteniendo esa distinción que les hacía tan especiales y elevar sus estándares de calidad. ¿Cómo ofrecer los mejores desayunos sin un buen café?
Cuatro años más tarde, siguen innovando con la ayuda del grupo Damm, pero siempre manteniendo su esencia original.
“En 2007 compramos nuestro propio tostador, con dos marcas de café porque queríamos tener un blended exclusivo de cafés dado que somos la enseña que más desayunos da en España. Es en 2012 cuando entra el grupo Damm a gestionar el grupo, pretendiendo mantener los mismos niveles de calidad pero adaptar la marca, sobre todo los establecimientos y la experiencia de consumo a un cliente más moderno y más joven”, explica la consejera delegada del grupo.
Rodilla celebra cada aniversario con orgullo, y no es para menos. En su 75 cumpleaños, allá por 2014, lanzaron su primer spot publicitario a nivel nacional. Su eslogan entonces: “Toda una vida juntos”. Y todo apunta a que aún les queda muchos años por delante.
Otra anécdota curiosa de ese mismo año fue el lanzamiento del sandwich Madrid, elaborado por un concursante de Masterchef, el talent show culinario más televisivo de España.
A Machín le gustaba el de bellota
2019 fue un año señalado ya que, además de cumplir 80 años, Rodilla apostó por el mercado internacional con la apertura de tres restaurantes en Miami. Ese año también inauguraron en Madrid su local más inclusivo, de la mano de la Fundación A La Par.
Con más de 150 restaurantes repartidos por España, Rodilla espera llegar a su centenario con el mismo espíritu con el que empezó. No en vano, mantienen para muchos de sus productos la misma receta que cuando comenzaron a elaborarlos.
Otro de los secretos de su éxito es haber usado los mejores ingredientes para sus preparados: jamón de Guijuelo, bonito de Vitoria para la ensaladilla…
Ya han catado sus famosos sandwiches personajes de renombre, desde Antonio Machín, que degustó el sandwich de bellota, hasta Antonio Flores, Fernando Romay o Alfredo Evangelista –dicen que se comió 20 de golpe–.