Smileat abrió a finales de 2014 “y cerramos 2016 muy bien, con 400.000 euros de facturación, llegando abreak-even. Hemos entrado en los grandesretailers: Carrefour, Alcampo, Dia, Costco, El Corte Inglés… y estamos en 1.700 puntos de venta en España. Hemos empezado con la internacionalización: Portugal, Italia, Francia y Polonia. Y ya hemos levantado dos rondas –142.000 y 260.000 más 100.000 euros de un Enisa–. Nuestras previsiones apuntan a 1,7 millones de facturación para este año”, enumera Alberto Jiménez, cofundador junto a Javier Quintana.
Aún recuerdan los 30.000 euros que consiguieron reunir para sobrevivir los tres primeros meses de vida y para producir sus primeras 10.000 unidades –toda su materia prima es española; la mayoría de Navarra y del País Vasco–. “Cuando empezamos no había demasiadas marcas. Era un mercado por explotar y queda mucho por hacer. No encuentras más de 2 o 3 marcas ecológicas de potitos en los lineales cuando en otros mercados hay 6 o 7. Hemos apostado por países del sur de Europa, que están en la misma situación que España. Se está produciendo un cambio de mentalidad hacia lo ecológico, pero todavía hay mucho desconocimiento sobre este tipo de productos. Cuando decimos que nuestro tarrito de pera y manzana contiene 50% pera y 50% manzana es así, no lleva ni agua, ni zumos, ni espesantes, como sí llevan otros. Los nuestros no llevan ni almidones, ni espesantes ecológicos. Cuando decimos que son lo más parecido a los de casa, es verdad”.
¿Y ecoalimentos para adultos?
También han empezado a trabajar en nuevas gamas de productos infantiles. Los próximos que van a lanzar son papillas, snacks y pouches saludables.
“Queremos consolidar nuestra línea de bebé y seguir creciendo, y estamos estudiando la línea de adultos. Estamos viendoun cambio de tendencia, tanto de las grandes superficies que están apostando por supermercados ecológicos como de padres que no consumían ecológico, pero sí compraban productos Smileat para sus hijos, y ahora han empezado a consumir también productos ecológicos. Es muy positivo, pero lo estamos estudiando, porque solo nos meteremos si podemos ofrecer productos con valor añadido como hasta ahora”.