La agencia de comunicación habría llegado a esta conclusión después de descubrir un hilo publicado en un tweet de la empresa Sistrix en el que se habla de la creación, dentro de Google, de un buscador específico para anunciar coches de segunda mano. “Según parece, Alphabet, la empresa matriz, podría estar desarrollando un buscador de coches usados, donde los propietarios de empresas de coches podrían subir su stock de vehículos de segunda mano o de kilómetro cero. Es probable que creen un vertical donde los concesionarios suban ofertas de los vehículos que tienen en stock. Todo apunta a que el objetivo de Google es captar mayor inversión publicitaria segmentada en su buscador.
La plataforma “permite encontrar vehículos (de momento solo en Estados Unidos, aunque la web geolocaliza a la persona y aparentemente mostrará coches cercanos a los usuarios) tiene ya disponible más de 100.000 vehículos diferentes pertenecientes, según vemos, a concesionarios y empresas de compra venta de coches americanos”, afirma Fernando Muñoz, especialista en SEO y socio en Grupo Raíz Digital.
En la plataforma podría verse lo que mismo que en cualquier otro buscador de vehículos usados, pero en este caso con especial enfoque en el precio y las características del coche. Desde las fichas de los vehículos se podría acceder a los teléfonos de los concesionarios o a la web del mismo, lo que indica que el objetivo final sería conseguir que parte de la publicidad de talleres, concesionarios y empresas de compra venta de vehículos, que, actualmente se van a las plataformas como coches.com, motor.es, coches.net, se vayan al buscador americano porque, si algo ha demostrado Google, es su capacidad de hacer dinero de la publicidad.
“Como en cualquier tienda online de las que estamos acostumbrados a usar, la plataforma contará con fotografías subidas por los concesionarios y las características del vehículo, sacadas de las bases de datos.
Precio, impuestos, condición del vehículo, kilometraje (de momento, en millas), color del exterior, color del interior y el VIN, (por las siglas en inglés de número de identificación del vehículo, que se corresponde con el número de bastidor europeo) completan las fotografías del estado para que el posible comprador pueda echar una ojeada antes de desplazarse al concesionario”
Con la gran base de datos de la web y la capacidad de proceso que tiene Alphabet, la plataforma prepara una comparativa de precios en tiempo real, que nos permitirá saber si el vehículo está en precio, si está por debajo del mercado en coches similares o, sin embargo, se encuentra por encima del precio que el mercado está acostumbrado a pagar por ese tipo de vehículos
Para terminar las fichas, aparecen los datos del concesionario, con un gran botón para ampliar información en la web del establecimiento local se complementa y otro botón de llamada al teléfono del concesionario, lo que puede incrementar el tráfico a empresas cercanas a los buscantes.
“La interfaz es la típica de Google: un gran cajetín de búsqueda blanca y, sobre los resultados, se puede filtrar la información con las opciones que te ofrece pero, si haces clic en uno de los coches, no podrás salir de su plataforma hasta que cliques en el botón del propio concesionario”. El comunicado difundido por el Grupo Raíz Digital facilita también un enlace al sitio de Google (https://www.google.com/local/cars) pero que, al clicar, no conduce a ninguna parte.
Según la empresa de la que parte la información, “el objetivo final de la plataforma que está desarrollando Google es que las empresas locales inviertan en publicidad segmentada en el buscador, lo que amplía el número de posibles clientes para Alphabet.
En palabras de Fernando Muñoz, “la mayor fuente de ingresos de Google es adwords, la verdadera mina de oro de Alphabet, donde cada vez más usuarios tienen que entrar a anunciarse porque el espacio gratuito que da Google en sus páginas de resultados es más exiguo. Con este vertical de productos, con este vertical de coches busca ‘morder’ parte de los beneficios de portales de compra venta de vehículos en todo el mundo ya que ataca a su fuente principal de ingresos: los anunciantes. Y es un vertical más que ataca, como ya hizo en su día con el mercado inmobiliario, los videos con youtube, google shopping y similares. Google tiene a los usuarios en el bolsillo (bueno, literalmente son los usuarios los que tienen a Google en el bolsillo a través de sus smartphones, verdadero caballo de Troya) ya que conoce todo de ellos: donde están, qué buscan, qué contactos tienen, qué redes sociales, las aplicaciones que tienen instaladas… por lo que mostrar anuncios de compra venta de vehículos a alguien que está buscando o necesita comprar uno es para ellos la mar de sencillo. Imagínate que Google sabe que has buscado un taller porque sabe que te has quedado tirado con el coche ¿No sería buen momento para enseñarte anuncios de coches usados o nuevos, que le cobra a esas empresas que venden coches? Pues claro, y ahí está su fuerza”