Estos nuevos modelos eliminan la fricción con los usuarios e introducen innovadores productos y servicios orientados a mejorar drásticamente la experiencia de los usuarios.
Las plataformas crean comunidades y nuevos mercados con efectos de red que permiten a los usuarios interactuar y realizar transacciones. Cada nuevo nodo de la red amplia el ecosistema y genera más efecto red, es decir, amplia la comunidad y, por lo tanto, su atractivo y valor.
Podríamos decir que la globalización, internet y las nuevas tecnologías han eliminado las barreras espacio y tiempo. Ahora la conexión entre comprador y vendedor se produce en tiempo real.
Es un hecho que los negocios basados en plataformas están creciendo más rápidamente que los negocios tradicionales por su menor coste de distribución y uso inteligente de las herramientas digitales que les permiten automatizar procesos, mejorar el servicio al usuario y personalizar la oferta.
Según un medio de comunicación, si observamos los últimos 10 años, hasta el 70% de las empresas de nueva creación con un valor de mercado superior a mil millones de dólares tienen un modelo de plataforma.
Sin lugar a duda, las plataformas están transformando: nuestra actividad cotidiana, los modelos de negocio, las industrias, y, en última instancia, la economía.
Son numerosos los ejemplos de éxito de plataformas que están generando disrupción en sectores tradicionales como: Uber, Airbnb, Amazon, Netflix, Spotify, Booking, …
Una característica importante de este modelo es que tiene clientes por los dos lados, pues tanto clientes como proveedores, son usuarios de la plataforma, lo cual genera un modelo de relaciones hasta ahora desconocido. Son muchas las plataformas (por ejemplo, Uber) en la que se califica tanto al proveedor del servicio como al usuario del mismo.
Aspectos clave del modelo
En ‘Platform Revolution’, libro muy recomendable para entender este nuevo mundo, se concretan algunos aspectos clave del modelo:
*Las plataformas pueden desarrollarse rápidamente porque el crecimiento en un lado de la red atrae a usuarios al otro. Es lo que se denomina el efecto red. La diversidad de la oferta hace atractiva la participación de usuarios y el crecimiento de usuarios promueve el incremento de la oferta.
*La arquitectura se concreta en cinco elementos: usuarios, artículo que se intercambia, moneda, filtros que ayudan al usuario a seleccionar su producto e información usada para tomar esa decisión
*Las plataformas crecen más rápido que los negocios tradicionales al tener bajos costes de distribución y crecimiento, utilizando analítica predictiva para mejorar la experiencia del cliente.
*Una plataforma rentable cobra a los usuarios o a terceras partes solo cuando esto no disuade a los usuarios de unirse y participar.
*La confianza y valor para el usuario son su esencia y sus métricas clave.
Por lo tanto, si como parece evidente, este modelo de plataformas tiene claros beneficios y en muchos casos están cambiando las reglas del juego de sectores enteros, parece obvio que las empresas, en el contexto de su estratégica, deberían realizar un ejercicio para analizar su potencial evolución a un modelo de plataforma.
Entender cuál es la lógica de este modelo, con independencia de la decisión final que se adopte de: desarrollar una plataforma global o parcial, participar en una plataforma existente o no participar al no encajar en nuestro propósito, resulta un ejercicio de gran valor para las compañías.
Además, con independencia de esta decisión, el ejercicio habrá merecido la pena en términos de entender mejor: la nueva economía, los comportamientos y necesidades de los usuarios, las nuevas reglas de la comunicación que evoluciona de “uno a muchos” a “de muchos a muchos”, el efecto red y sus consecuencias.
Analizando los distintos sectores se observa que esta disrupción se puede producir por la evolución a plataforma de toda su cadena de valor o líneas de negocio, de un conjunto de ellas e incluso incorporarse como nodo de un ecosistema ya creado o de nueva creación.
En cualquier caso, para tomar esta decisión son interesantes algunas reflexiones:
*¿Encaja con el negocio?
*¿Es sostenible un negocio basado en producto en un mundo conectado?
*¿Estamos perdiendo oportunidades y competitividad al no aprovechar el “efecto red”?
*¿Cómo de importante es para el negocio la interacción directa con los clientes?
*¿Qué alianzas se podrían desarrollar con terceros?
*¿Se podría experimentar con alguna línea de negocio?
*¿Posibilidad de acceder a nuevos mercados?
Otro aspecto muy relevante es entender que ser proveedor de una plataforma tiene, como mínimo, dos costes: el económico (porcentaje que se paga por la venta de los servicios o productos) y el de la información (los datos de las transacciones los gestiona la plataforma).
Por otro lado, las plataformas transforman la organización de las empresas, pues ahora el valor es creado por la comunidad de usuarios. El modelo migra de controlar recursos y procesos internos y levantar barreras competitivas a orquestar recursos externos y conseguir el compromiso y la actividad de una comunidad.
Desde el punto de vista del cliente estos ecosistemas tienen números beneficios como la diversidad de la oferta, el servicio 24/7, la experiencia o la personalización.
Estamos viviendo un cambio de paradigma en el mundo de los negocios como nunca antes se había producido en nuestra historia, y posiblemente hoy se haya convertido en un imperativo para todas las empresas entender cómo les afecta y cómo pueden aprovecharlos para ganar competitividad y ser más relevantes en el mercado.
Por eso, si no has pensado en tu negocio como plataforma …. Deberías.