Lo ideal es que ofrezcas el mayor número de opciones de pago y que el cliente decida cuál prefiere. Existen cuatro fórmulas: contrarreembolso, transferencia, tarjeta de crédito o débito y medios como Paypal. Pero esto no siempre es posible. Depende de la plataforma elegida, unas permiten utilizarlas todas y otras limitan la venta a una sola modalidad.
Incentiva el pago por transferencia
Si tu plataforma permite las cuatro opciones, puedes estimular el uso de las más rentables para ti con descuentos especiales. Por ejemplo, “gratificar con un descuento de hasta un 5% el pago por transferencia bancaria, que al comercio le cuesta cero. En cambio, los cobros por tarjeta suelen tener una comisión que oscila entre el 0,5% y el 3%, dependiendo del acuerdo al que hayamos llegado con la entidad bancaria. Y Paypal carga una comisión del 5%. Lo mejor es evitar en lo posible este sistema de pago. En España, además, no es muy conocido por todos los usuarios. Entre un 50% y un 60% de las compras se realizan con tarjeta, otro 30% contrarreembolso y el resto por transferencia. Está claro que eliminar la opción de pago con tarjeta pone limitaciones al comercio, mientras que prescindir de Paypal no supone nada”, asegura Pepe Isabal.
La pasarela de pago
Otra factor importante es el tipo de pasarela de pago que vayas a utilizar. Las plataformas estandarizadas ya las tienen incluidas y no tienen por qué presentar ningún problema. Pero si tienes que desarrollar una propia, busca una empresa que esté especializada en estos proyectos. Es una de las partes de los comercios on line a medida que más suele fallar.