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28 Mar, 2023

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En la travesía del desierto

La mayoría de los emprendedores pasa por una fase de baches psicológicos y emocionales. Suele suceder poco después de poner en marcha tu negocio y sigue a la fase de euforia de los primeros momentos. Es cuando empiezan a surgir los primeros problemas... Pero se superan.

Al principio, todo parece fácil. Una buena idea, un plan de empresa que corrobora sus posibilidades y un par de obstáculos que, sobre el papel, no parecen muy importantes. La idea es fenomenal y todo tiene que salir sobre ruedas. No puede ser de otra manera. Sin embargo, a los pocos meses empiezan a surgir los problemas. Problemas que, como suele ocurrir en estos casos, son muchos más de los previstos y que suelen provocar las primeras dudas, las primeras caídas de ánimo y las primeras resistencias psíquicas. “Entonces llega la parte más dura: la travesía del desierto. No encuentra financiación, los clientes o proveedores no actúan como pensaba, descubre que no tiene tantos apoyos como creía…”. Así lo explica Álvaro Sancho,director adjunto del departamento de Creación de Empresas del Instituto Empresa (IE). “Ahí viene un bajón anímico muy importante. Los emprendedores de verdad continúan, y los que no lo son tanto, se echan atrás”.

Educación psíquica

Gustavo Piera, presidente del grupo CMR Ibérica y experto en inteligencia emocional aplicada a la empresa, describe en su libro La travesía las dificultades emocionales que se encuentra el emprendedor. Piera utiliza la metáfora de un viaje en un barco velero para analizar las principales amenazas: no tener claras las metas, la falta de motivación, la frustración, el bloqueo ante los imprevistos o la dificultad para controlar las emociones, entre otras. Las universidades y las escuelas de negocio preparan a los emprendedores para hacer frente a todas las situaciones desde el punto de vista empresarial, pero es difícil enseñarles a reforzar su resistencia psíquica.

Según Isidro de Pablo, catedrático y director del Centro de Iniciativas Empresariales de la Universidad Autónoma de Madrid, los problemas que más minan la moral son: Los imprevistos. Situaciones desconocidas y no deseadas, como la falta de tesorería, el retraso de los suministros, un colaborador que abandona el proyecto, un error que provoca la pérdida de clientes… La capacidad de enfrentarse a ellas condicionará el éxito”, afirma De Pablo.

El cambio de vida. “Las personas que pasan de trabajar por cuenta ajena a hacerlo por cuenta propia tienen que adaptarse a vivir para trabajar durante una época. Eso hace que las relaciones personales se resientan”, explica.

Perfiles de riesgo

Los inexpertos. La capacidad para superar el desaliento dependerá, según Isidro de Pablo, del momento vital y de la motivación. Los emprendedores jóvenes tienen más resistencia psíquica porque tienen mucho que ganar y poco, o muy poco, que perder. Sin embargo, su inexperiencia puede llevarles a sobredimensionar los problemas y a no enfocar los problemas en su justa medida.

Los expertos.Un segundo perfil de emprendedor es el de los profesionales con experiencia que deciden lanzarse a la aventura de crear su propia empresa. A estos les resulta muy duro romper su trayectoria profesional, más aún si tienen cargas familiares o hipotecas. Su tolerancia a la presión será más baja, pero por otra parte saben dónde se meten y están preparados para sortear los obstáculos.

Los necesitados. Por último, nos encontramos al llamado ‘emprendedor por necesidad’. Se trata de una persona que monta un negocio para salir del paro, ascender profesionalmente o conciliar la vida familiar con la profesional. Estará más expuesto al desaliento, pero a la vez tiene una fuerte motivación para seguir adelante.

Gestor de emociones

Cuando los problemas llegan y ponen a prueba la resistencia psíquica, el emprendedor, como primera medida de choque, “no debe negarlos ni relativizarlos, pero tampoco afrontarlos con miedo, desesperación o enfado: tiene que comprender que son algo habitual, que forma parte del entramado del negocio y, sobre todo, del momento de empezar”, aconseja Pedro César Martínez, director de consultoría y formación de Psicotec, firma especializada en la gestión de Recursos Humanos y el apoyo a directivos y empresarios. “Una persona que ante el riesgo o ante un mal día de ventas reacciona con tensión, va a gestionar peor ese momento crítico que una persona que lo evalúa, analiza con su equipo qué está pasando y empieza a tomar medidas para solucionarlo”, explica. “Los estados emocionales preestablecen determinadas formas de apreciar el entorno y condicionan la toma de decisiones”. Por eso, el emprendedor debe convertirse “en un gestor de sus emociones”.

La resistencia psíquica, según explica Pedro César Martínez, de Psicotec, “está muy relacionada con unas serie de rasgos del carácter que definen al emprendedor: determinación, capacidad de asumir riesgos, entusiasmo, capacidad de decisión, iniciativa, entereza, confianza en uno mismo, motivación…

Esta serie de actitudes, unidas a los conocimientos empresariales y a la experiencia, deben ayudar a superar las dificultades, así que si el emprendedor no las tiene, le conviene rodearse de un equipo cuyos miembros sí las tengan”.

Autodiagnóstico de actitudes emprendedoras

Antes de poner en marcha el negocio, puede ser muy útil hacer un ‘plan psicológico de empresa’ mediante el Autodiagnóstico de Actitudes Emprendedoras. Este Autodiagnóstico es una herramienta interactiva que la Dirección General de Política de la Pyme ofrece de forma gratuita en su web (www.ipyme.org).

Isidro de Pablo, director del equipo que la diseñó, explica que esta herramienta evalúa el carácter emprendedor según siete valores: motivación, iniciativa y energía personal, perfil psicológico, capacidad de análisis, innovación y creatividad y propensión al riesgo.

El funcionamiento no es complejo. El emprendedor que la quiera consultar debe contestar un cuestionario tras el cual se encuentra una base de datos formada por cerca de cien entrevistas a empresarios de éxito, a los que se les preguntó qué harían en determinadas situaciones y por qué. Con las respuestas del cuestionario, la herramienta puede definir las características del usuario y ofrecerle los consejos de los empresarios encuestados que son más acordes con su perfil. De esta forma, según Isidro de Pablo, “los experimentados pueden hacer recomendaciones a los noveles”.

Y es que cuando los problemas llegan, “hay que afrontarlos y seguir adelante”. Para Carlos Menéndez, fundador de la empresa Select Foods, una buena forma de evitar la presión y el estrés es hacer deporte, que ayuda a desconectar y a olvidar temporalmente las preocupaciones.

Un pequeño respiro para seguir trabajando, porque para salir adelante, es fundamental “la capacidad de lucha y no desanimarse: creer en tu proyecto, aunque haya que remodelado”, afirma. “De los planes iniciales a lo que realmente sale, puede haber mucha diferencia”.