La primera herramienta que necesitas para montar un ecommerce es un CMS y hay unos cuantos entre los que elegir, así que no te apresures al tomar la decisión.
Con el gestor de contenidos que escojas vas a construir tu tienda online. Será la piedra angular de tu negocio y de él dependen, entre otras cosas, el número de productos que puedes incluir en el catálogo o la facilidad con la que los clientes realizan la compra.
Para que el CMS trabaje a tu favor en el desarrollo de tu negocio, asegúrate de que cumpla con esta lista de diez requisitos que hemos elaborado con la ayuda de Shopify, un SaaS de pago mensual, que permite a sus usuarios disponer de una herramienta actualizada constantemente, sin invertir en mantenimiento e ir añadiendo nuevas funcionalidades a través de plugins de servicios disponibles en su app store a medida que va creciendo el negocio.
1. Puesta en marcha sencilla y rápida
Sé práctico y opta por un CMS que permita arrancar rápido a cualquier persona, con o sin conocimientos técnicos. Esto no significa elegir un sistema con menos funcionalidades que otros o que el resultado vaya a ser menos profesional, sino que tiene una curva de aprendizaje rápida. De este modo, podrás poner en marcha tu tienda y empezar a facturar de forma muy sencilla en pocos días, sin necesidad de tocar el código, sin tener que recurrir a un desarrollador especializado o sin contratar a una agencia para que lance y gestione tu proyecto.
2. Que permita centrarte en el negocio
La lista de tareas y trámites pendientes de hacer antes de crear una tienda online suele ser interminable. Si el sistema te permite eliminar alguna, bienvenido sea.
Valora, por ejemplo, si incluye el registro de dominio y hosting web ilimitado. Así, evitas dedicar tiempo en comparar distintos proveedores, analizar si son compatibles con el alcance de tu proyecto, configurarlo o estar pendiente de las renovaciones anuales. Un CMS con alojamiento incorporado, te permitirá centrarte desde el primer momento en hacer crecer tu negocio.
También es importante que proporcione el certificado SSL gratuito para cifrar el contenido de tu tienda online utilizando el protocolo https. Con ello, el ecommerce mostrará el conocido ícono del candado cerrado, justo a la izquierda de la url, en lugar de advertir a las visitas que la conexión no es segura. Tener el candado transmite confianza a tus clientes.
3. Escalable
Del CMS depende la experiencia del cliente durante la compra y poder ir añadiendo funcionalidades a medida que crece el negocio. Por eso es importante elegir una plataforma que no limite esta capacidad de crecimiento, sino que permita ir incorporando aplicaciones al ecommerce según sus necesidades.
En ese repositorio de apps no pueden faltar complementos para gestionar el inventario o la preparación y entrega de pedidos, tampoco los que miden el éxito y ayudan a optimizar las operaciones. El objetivo es hacer tu tienda online cada vez más competitiva.
4. Un sistema fiable y especializado en ‘ecommerce‘
Por muy sencillo que pueda ser configurar una tienda online, siempre surge alguna duda. Por eso, anota como algo positivo que el CMS esté especializado en eommerce; también que cuente con un centro de recursos en formato post, tutoriales, guías, podcast, vídeos…donde ampliar la información sobre el funcionamiento de la plataforma. Si, además, ofrece consejos para emprender online, como contenidos sobre marketing o gestión empresarial, mejor.
Otra cosa, ¿tiene una comunidad amplia y dispuesta a cooperar? Un foro activo en el que los vendedores se preguntan y solucionan dudas es buena señal. Mejor aún cuando también ofrece soporte técnico 24 horas. Gracias a este servicio encontrarás siempre a una persona de atención al cliente dispuesta a echarte una mano 24 horas al día, durante 365 días al año, los 7 días de la semana. ¡Esa tranquilidad no tiene precio!
5. Diseño personalizado y profesional
Tu tienda online debe ‘respirar’ la imagen de tu marca. Para ello, es importante que escojas un CMS con una colección de plantillas lo suficientemente completa como para encontrar la base del diseño que buscas.
También debe ser fácil personalizarla, sin necesidad de saber programación. Por ejemplo, podrás necesitar servicios puntuales para obtener una imagen más profesional en aspectos concretos, como recurrir a un servicio freelance de diseño de logos al principio de la estrategia para crear una imagen de marca sólida y profesional. Sin embargo, la sencillez del CMS te permite modificar tu ecommerce al detalle sin depender constantemente y para todo de un profesional en el campo. Así podrás modificar colores y tipografías de modo que tu tienda sea única y no parezca la copia de otra.
6. Buena velocidad de carga
Por muy bonito que sea el diseño de tu ecommerce y por muy buenos productos que vendas, si nadie los ve no sirven de nada. En este sentido, la velocidad de carga de un sitio web es crucial. Unos segundos más de los que el cliente potencial es capaz de esperar y te abandonará por la competencia.
Ten en cuenta que cuantos más clientes y productos tengas, como consumen ancho de banda, más lento irá todo en tu tienda. Muchas plataformas limitan el ancho de banda disponible y cobran por excederlo. Shopify, por el contrario, incluye ancho de banda ilimitado en todos sus planes. Esto significa que no se te cobra en función de cuántas visitas recibe tu tienda online o de cuántos archivos o fotos subas.
7. Una tienda online que se adapta a los teléfonos móviles
Hace tiempo que el móvil le ganó la batalla al ordenador a la hora de buscar, ver, leer y comprar online. El 92,1 % de los usuarios ya accede a Internet mediante este dispositivo, frente a un 77,5 % que prefiere el ordenador portátil.
Las cifras no engañan, así que contrata un CMS que facilite el diseño responsive tanto en las plantillas disponibles como en el panel de administración.
Las tiendas online adaptadas a móviles son más fáciles de navegar y requieren menos tiempo de carga, lo que reduce el porcentaje de rebote. Cuidar la experiencia de usuario en todos los dispositivos se traduce en una percepción positiva de tu marca.
8. Con catálogo de productos ilimitado
Si el pilar de tu tienda online son los artículos que vendes, facilitar la gestión del catálogo debe ser de las premisas más importantes de una plataforma de comercio electrónico. Por tanto, dale un punto positivo a los CMS que no ponen limitaciones en la cantidad de productos subidos, sea cual sea el plan de precios por el que te decidas. El proceso de creación de tus fichas de productos también debe ser sencillo.
Y nunca está de más que permita optimizar tus categorías y artículos a través de un cuadro de mandos en el que puedas editar elementos que mejoran el SEO on page como: Title, meta description, url, encabezados, poner el atributo alta a las imágenes de tus productos…Si ayuda a posicionar en Google, ¡otro punto positivo!
9. Proceso de compra sencillo
El proceso de compra es el conjunto de etapas por las que un cliente debe pasar para formalizar un pedido en una tienda online. Cuantos menos pasos tenga que dar, más posibilidades hay de que finalice el pago en lugar de abandonar el carrito.
Lo adecuado es que el proceso se limite a cuatro etapas: carrito, información, envío y pago. Comprueba que es así en el CMS que quieres para tu ecommerce; también que el proceso es intuitivo, con una pasarela de pagos sencilla, segura y que inspira confianza.
10. Integración con otras plataformas
El último punto que Shopify apunta en la lista de ‘imprescindibles’ que debe tener el CMS de tu ecommerce es su capacidad para integrarse con otras plataformas, de modo que puedas conectar tu tienda online con marketplaces (Amazon, eBay…), proveedores de dropshipping y tus perfiles de redes sociales.
Con ello, las posibilidades de poder abrir nuevos canales de venta aumentan considerablemente y de manera sencilla, con la ventaja añadida de tenerlo todo conectado entre sí.