Oroquieta no detecta una tendencia clara en cuanto a qué países sienten especial atracción por el mercado español. “Destacaría una corriente protagonizada ahora mismo por las marcas francesas, que proponen negocios no muy masivos y con un potencial de crecimiento limitado”. Barbadillo se fija en China. “En general, y desde hace ya algunos años, los países asiáticos están encontrando un gran atractivo en España y en todo lo que representa”.
De mercados con mayor afinidad, como Latinoamérica, proceden un buen número de marcas. Eduardo Abadía, gerente de la Asociación Española de Franquiciadores (AEF), confirma que cadenas brasileñas y mexicanas ya están dando pasos importantes para entrar. “Y los países de la cuenca mediterránea también miran España como un lugar interesante”, concluye Barbadillo.