La cadena de lavanderías de autoservicio Fresh Laundry continúa con su proceso de expansión por Cataluña. Tras la apertura en Igualada, en la Avenida Balmes, 61, cuenta con 34 lavanderías distribuidas por municipios como Terrassa, Sant Vicenç dels Horts, Vilanova i la Geltrú, Molins de Rei o Vic, que se suman a los 3 locales propios de la empresa.
“El negocio de las lavanderías de autoservicio era una oportunidad a explotar en el territorio catalán. Nosotros empezamos con la idea el año 2012 y ahora el número de establecimientos se ha duplicado. Brindamos a la gente un servicio rápido, económico y eficiente“, asegura Haboba Gleizer, fundador y propietario de Fresh Laundry.
Apuesta por un modelo de expansión
Fresh Laundry también está en proceso de expansión en el resto de España en ciudades como Madrid -el primer local fuera de la comunidad catalana-, Pamplona, Castellón, Sevilla y Málaga. Debido a esta expansión fuera de Cataluña, Fresh Laundry alcanzará las 55 lavanderías este 2016, según sus previsiones.
Según la compañía, éste es un “proyecto innovador con un modelo de negocio sostenible y eficiente. Hacer la colada en sus lavanderías puede suponer un ahorro de 16,6 euros semanales para una familia media, lo que se traduce en hasta 900 euros anuales”. Con una facturación en torno a los 800.000 euros en el 2015, Fresh Laundry cuenta con una plantilla de 14 trabajadores y prevé duplicar sus ventas y registrar 1,6 millones de euros de facturación en el actual ejercicio.
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