La franquicia de lavanderías autoservicio Fresh Laundry planea abrir 120 lavanderías transportables en los próximos 5 años, de las cuales 25 se inaugurarán en 2017, según los planes de expansión de la compañía.
Cada ‘Fresh Box’ supone una inversión de 85.000 euros y la cadena tiene prevista la expansión de este servicio a partir de futuros franquiciados de la marca. Fresh Laundry ya cuenta con una primera ´Fresh Box´ en propiedad, instalada en la localidad barcelonesa de Sant Fost de Campsentelles, cerca de Martorelles.
“Las lavanderías autoservicio transportables son el paso definitivo hacia la concepción de hacer la colada en cualquier sitio, sin necesidad de estar en casa. Nos movemos en un mundo en el que la tecnología juega un papel protagonista en nuestra rutina, y el lavado de nuestra ropa no puede ser una excepción”, afirma Roberto Haboba Gleizer, fundador y propietario de Fresh Laundry.
‘Fresh Box’ consiste en una estructura compuesta de hierro de algo más de 5 toneladas, 24 metros cuadrados de superficie y está construida sobre una plataforma nivelada de hormigón. En su reducido espacio cuentan con tres lavadoras de 8 kg, otras dos de 17 kg y tres secadoras de 17kg.
Por otro lado, los módulos transportables de lavanderías autoservicio complementarán a la red de lavanderías de autoservicio ‘Fresh Urban’, al tener presencia en nuevas ubicaciones con otro tipo de ofertas: desde centros comerciales, estaciones de esquí, hasta aparcamientos o gasolineras. “Facilitará al cliente el realizar un lavado, complementándolo con otro tipo de servicios, como hacer las compras”, concluye Haboba Gleizer.