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29 May, 2023

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¿Por qué los autónomos no celebran la subida del SMI?

La subida del Salario Mínimo Interprofesional (SMI) supondrá para los autónomos un aumento de las cuotas mensuales a la Seguridad Social de entre 3 y 12 euros. Sin embargo, se calcula que más de un millón de autónomos no facturan el equivalente al SMI.

SMI para los autónomos

Mientras que los trabajadores por cuenta ajena celebran la subida del SMI de 15 euros que, previsiblemente, se aprobará esta semana, los trabajadores por cuenta propia lo lamentan. No es una razón de falta de solidaridad, la explicación es tan sencilla como que lo que a unos les va a suponer un incremento en un ingresos mensuales, en los autónomos el incremento se va a traducir en gastos.

Al subir el SMI, sube la base de cotización mínima, y como consecuencia, también lo hace la cuota de autónomos. De fijarse la subida anunciada de 15 euros, el SMI quedaría en  965 euros brutos al mes en 14 pagas. Se pretende así beneficiar a más 1,2 millones de trabajadores por cuenta ajena cuyos beneficios anuales están por debajo de los 12.600 euros.

Sin embargo, en lo que atañe a los autónomos, facturen o no la cantidad equivalente a SMI, verán incrementadas sus cuotas. Cierto que está prevista una reforma del pago de los autónomos por tramos de ingresos, pero mientras llega y no, la realidad a día de hoy es que van a pagar más a la Seguridad Social. Se supone, que más de un millón de trabajadores autónomos en España no alcanzan la facturación correspondiente al SMI.

La subida no supone la misma cuantía para todos los autónomos. Esta debe calcularse en función de la base de cotización de cada uno. Así, un autónomo que tenga establecida la base mínima de 944,40 euros al mes -la mayoría-, tendrá que pagar una cuota mensual de 289 euros. En el supuesto de haberse acogido a la base máxima, 4.070,10 euros, la cuota será de 1.245 euros. Tanto en un caso como en el otro, subirán las cuotas correspondientes a contingencias profesionales (del 1,1% a 1,3%) y por cese de actividad (del 0,8% a 0,9%), por lo que las cuotas totales pasan del 30,3% al 30,6% de la base de cotización. Los conceptos por contingencias comunes y formación profesional permanecen inalterados, con un 28,3% y un 0,1%, respectivamente.

Súmese al aumento de las cuotas el incremento salarial que han de aplicar muchos de esos autónomos que cuentan con algún trabajador a su cargo.

La subida del SMI y los contratos públicos

De aquí que las principales organizaciones en defensa de los trabajadores autónomos, como ATA, alcen la voz en contra de esta subida.  “Lamentamos que esta subida se realice en este momento, sin tener en consideración a los autónomos y pequeños empresarios que es a quien más afecta la medida y no a las grandes empresas”, declaraba Lorenzo Amor, presidente de ATA.

Asimismo, ATA aprovecha para hacer otra reivindicación exigiendo a las Administraciones que “indexen la subida del SMI a los contratos públicos con autónomos. Decenas de miles de autónomos que prestan servicios de limpieza, recogida de residuos, jardinería, cuidado y dependencia, etc, con multitud de ayuntamientos y demás administraciones públicas han visto crecer más de un 30% en los últimos 3 años sin que se hayan visto revisados los contratos de prestación de servicios de estos autónomos con la administración.

“Es muy fácil disparar con pólvora ajena, tomar decisiones de subida unilaterales de los salarios de los trabajadores pero no aplicarse el cuento de esta subida”, sostiene el presidente de ATA.

Cada vez menos autónomos

Lo que está claro es que medidas como ésta no parecen animar a muchos a darse de alta en el RETA, un régimen que, en el mes de agosto, perdió 12.187 cotizantes, es decir un 0,4%, según ATA. También desde la Unión de Profesionales y Trabajadores Autónomos (UPTA) se alertaba el pasado mes de junio de la pérdida de  206.007 trabajadores por cuenta propia desde que empezó 2021. Lo que no se sabe muy bien s dónde han ido a parar todos esos autónomos, si han sido contratados, por cese definitivo de actividad, jubilación o, sencillamente, porque han pasado a escabullirse en la economía sumergida.