Estudiar el curso adecuado es fundamental para distinguirse de la competencia, pero muchos profesionales acaban renunciando a esta posibilidad por que creen que el coste será alto o porque no encuentran lo que necesitan.
La solución está al alcance de cualquier trabajador gracias al sistema de Formación Profesional para el Empleo gestionado por la Fundación Tripartita, que reúne a Administraciones Públicas, asociaciones empresariales y sindicatos. Se trata de una serie de ayudas, provenientes de la Seguridad Social con la ayuda del Fondo Social Europeo, que permiten a los trabajadores acceder a la formación continua gratuitamente, mediante dos vías:
- Iniciativa de las empresas. Según la denominación técnica, hablamos de “formación de demanda”. La empresa ofrece a sus empleados una serie de actividades formativas o bien les concede permisos individuales de formación para que realicen cursos externos con cargo a la compañía. Para financiarlos, las empresas cuentan con bonificaciones en sus cuotas a la Seguridad Social. El inconveniente para los alumnos es que es la empresa la que elige los contenidos, el centro que organiza las clases y, en general, el tipo de formación.
- Iniciativa de los trabajadores (o “formación de oferta”). Todos los profesionales tienen a su disposición una larga lista de cursos gratuitos a los que pueden acceder en su tiempo libre. Los organizan las entidades que forman parte de la Fundación Tripartita, que los imparten en sus propios medios o los encargan a centros de formación privados. La formación de oferta, la opción más desconocida, abre un gran abanico de posibilidades, ya que permite elegir entre todo tipo de materias, horarios y centros.
Desde la Fundación Tripartita señalan que “en el último año se observa un incremento de la participación en los cursos programados dentro de la formación de oferta: en el avance de resultados de 2008 se estima una participación cercana a 1.200.000 trabajadores”. Y parece que en 2009 aumentará la cifra, pues estos alumnos “valoran positivamente el impacto que tiene la formación para el mantenimiento del empleo y para encontrarlo más fácilmente”.
A esta flexibilidad se le añade una creciente oferta de cursos on line, cada vez más habitual gracias a ventajas como “la personalización one to one y el acceso a la formación just in time”, señala José Lozano, presidente de AEFOL, la entidad organizadora de Expo E-learning. “El desarrollo de Internet está haciendo avanzar cada vez más el e-learning, que va calando en la formación continua, donde ha predominado la formación presencial”, afirma.
NORMAS DE ACCESO
Cualquier trabajador por cuenta ajena puede acceder a la formación de oferta gestionada por la Fundación Tripartita, aunque siempre hay que cumplir algunos trámites y normas.
- Primero los ocupados. “La formación de oferta va dirigida preferentemente a los trabajadores ocupados, aunque en estos cursos pueden participar desempleados en función del programa formativo concreto y en determinados porcentajes”, señalan los expertos de la Fundación Tripartita.
- La documentación. A los empleados por cuenta ajena se les pide el DNI. A los autónomos, además, los comprobantes de estar al corriente en los pagos a Hacienda y la Seguridad Social.
- Inscripción. Las entidades organizadoras publican su oferta de cursos, en la que se detallan sus características, horarios y fechas. Basta con solicitarlos.
- Para los cursos generalistas. “El mayor volumen de la formación de oferta responde a contenidos transversales, que son de utilidad y aplicación en cualquier sector: idiomas, aplicaciones informáticas, prevención de riesgos laborales, etcétera”, afirman desde la Fundación Tripartita. Para acceder a estos cursos, sólo se requerirán los conocimientos previos necesarios para adecuarse al nivel del grupo.
- En los especializados. Es posible que se deban acreditar ciertas competencias o experiencia previas en el sector o la actividad correspondiente. En cualquier caso, desde la Fundación Tripartita “se están llevando a cabo diversos programas formativos para la recualificación de los trabajadores en competencias de otros sectores productivos con el objetivo de reorientar profesionalmente a los que más dificultades pueden tener para el mantenimiento de su empleo”.
- Atento a la obligaciones. Los expertos de la Fundación Tripartita recuerdan que “es necesario asistir con regularidad a las clases y realizar las actividades que se propongan. En los cursos on line, la participación del alumno se asegura a través de herramientas de comunicación que incorporan las plataformas de teleformación, además de la intervención de los tutores, que animan a la participación”.
AYUDA PARA BUSCAR
Los cursos están organizados por el INEM, los servicios regionales de empleo, asociaciones empresariales, colegios profesionales, sindicatos… La oferta es tan amplia, que a veces no es fácil encontrar el que más interesa. Para buscar con criterio, conviene tener en cuenta estos consejos:
- Orientación. Tanto la Fundación Tripartita como las entidades que la integran ofrecen toda la información necesaria. “Para facilitar la decisión de qué formación pueden responder mejor a las diferentes necesidades, es aconsejable dirigirse a los servicios públicos de empleo y las organizaciones empresariales y sindicales. También pueden acceder directamente a los diferentes servicios de información y atención habilitados al efecto, entre ellos el de la Fundación Tripartita”, aconsejan desde esta entidad. Además, CEOE y Cepyme han puesto en marcha el Centro de Información para la Formación en el Empleo (CEIFOR).
- Buscadores. La Fundación Tripartita, los servicios públicos de empleo y los principales agentes sociales tienen herramientas web para localizar cursos por localidad, sector y modalidad.
- Organizaciones sectoriales. El mejor lugar para informarse sobre cursos de contenido sectorial serán las asociaciones empresariales, agrupaciones gremiales, colegios profesionales o sindicatos correspondientes.
- Centros de prestigio. Para seguir cursos de contenidos transversales, como idiomas o informática, puede ser interesante dirigirse a las academias privadas y preguntar si cuentan con convenios para ofrecer Formación Profesional para el Empleo.
¿Y LOS AUTÓNOMOS?
La Formación Profesional para el Empleo también es un derecho de los trabajadores autónomos, pero las condiciones de acceso son algo distintas. César García, director del Departamento de Política Sectorial de UPTA España, señala las siguientes barreras:
- Presupuesto. Los autónomos tienen acceso a una parte de la formación destinada a los trabajadores por cuenta ajena, con lo cual “la oferta de cursos es más reducida”. El acuerdo alcanzado el pasado 6 de mayo en el marco de la Mesa del Autónomo establece que se estudiará “la mejora de los recursos destinados a la formación continua de trabajadores autónomos, trasladando esta propuesta a las partes implicadas en la Tripartita”.
- Contenidos. “Tenemos acceso a contenidos transversales. Hay que conseguir que la formación específica llegue a cada sector”, destaca César García.
- E-learning. Es muy útil para los autónomos por sus largas jornadas de trabajo, en sectores en los que la dispersión geográfica hace difícil organizar un curso presencial. “Hemos puesto en marcha varias iniciativas y han dado buenos resultados. Sobre todo en turismo rural y comercio, y también es muy útil para los profesionales liberales. Pero hay sectores en los que no funciona como debería porque aún no están informatizados, como Hostelería, Construcción y Transporte”.
- Profesionales liberales. Éstos cotizan por medio de mutualidades en lugar de hacerlo al régimen de autónomos, por lo que han de acceder a la formación continua a través de sus colegios y organizaciones propias.