A veces, menos es más. Aunque, en las fases iniciales de un proyecto emprendedor pueda parecer que dormir poco y mantener jornadas de trabajo maratonianas es imprescindible, lo cierto es aprender a tomarse un descanso está ligado de forma directa con el éxito en los negocios.
En este sentido, el emprendedor Aytekin Tank recuerda sus primeros años de carrera como un pozo sin fondo de horas de trabajo. “Creía que el éxito requería de 16 horas de trabajo diarias. Siempre estaba construyendo, expandiendo y mejorando”, comenta. Sin embargo, la experiencia le ha enseñado que “ocupado y exitoso no son los mismo”. Por eso, reconoce que quizás sus empresas hubieran crecido más rápido si hubiera dedicado más tiempo al descanso.
Además de a la productividad, el exceso de trabajo también afecta de forma directa a la propia salud. Según los estudios, dormir menos de seis horas -los expertos recomiendan ocho- reduce de forma importante el rendimiento en la oficina. Pero no todo es el sueño. El descanso también debería incluir momentos de desconexión en los que hacer deporte, leer o meditar. En este sentido, los grandes emprendedores de Silicon Valley han aprendido la importancia del descanso para su rendimiento y el de sus compañías.
Cómo comenzar a prestar al descanso la atención que merece
Pero, como todo cambio, aumentar las horas dedicadas al descanso necesita de un proceso gradual y controlado. En este sentido, Tank hay recopilado algunos de los pasos que le han ayudado a mejorar en este aspecto.
Empieza con las pequeñas pausas. El emprendedor recomienda comenzar evaluando los momentos más productivos de la jornada, y programar pequeñas pausas para desconectar a lo largo del día. “Los descansos regulares pueden prevenir la fatiga que conlleva el hecho de estar tomando decisiones todo el tiempo, restauran la motivación, aumentan la productividad y la creatividad, y consolidan la memoria”, explica.
Reservar tiempo para reflexionar. Guardar una parte de la jornada, o de la semana, para reflexionar de forma calmada y encontrar nuevas ideas es una parte fundamental del trabajo de los emprendedores, aunque a veces es difícil encontrar un hueco. Sin embargo, los grandes del mundo de los negocios, como Bill Gates, siempre han dedicado importantes periodos de tiempo a retirarse durante unos días para leer, pensar y averiguar nuevas estrategias que aplicar en sus compañías. Aunque esta actividad tiene mucho que ver con el trabajo, también es parte del descanso.
El descanso de la tecnología. Aunque sea fin de semana o la jornada laboral haya finalizado, en muchas ocasiones es inevitable no seguir respondiendo correos o haciendo llamadas desde el móvil. Por eso, el experto recomienda tomarse un descanso de la tecnología, al menos, una vez a la semana. “Un cerebro cansado y estresado no puede generar nuevas ideas, y se vuelve más propenso a comer errores”, explica Tank.
Trabajar para vivir. Esta es una de las claves para conseguir un descanso efectivo. En el entorno de los emprendedores, muchas veces se confunde la finalidad del trabajo. Vivir para trabajar, además de eliminar por completo al descanso, puede producir una ansiedad muy perjudicial para la productividad. En este sentido, es necesario dejar tiempo para dedicar a la familia y los amigos sin pensar en el trabajo.