Y, por otro, los más de 61.300 millones en los que el banco emisor cifra las ayudas que la banca ha recibido como ‘rescate’; cifra de la que unos 30.000 son irrecuperables.
Saneamiento
Fuentes del Ministerio de Economía señalan que uno de los objetivos del saneamiento que el Gobierno ha hecho del sector financiero es que “los bancos estén en disposición de ofrecer financiación a medida que se consolida la recuperación económica”. Las mismas fuentes aseguran que el propio Ministerio ha llevado a cabo varias acciones para favorecer la recuperación del crédito: “Ha sellado un acuerdo por el que las entidades se comprometen a relanzar el crédito a pymes con 10.000 millones adicionales en financiación; se han reforzado las líneas ICO (22.000 millones) y se ha alcanzado un acuerdo con el banco público alemán Kfw para fomentar el crédito a pymes (800 millones de euros). Y se modificará la definición de pyme para facilitar el acceso de las empresas a nuevos créditos”.
Asimismo, el Gobierno ha anunciado que trabaja en varias medidas legislativas para potenciar la financiación no bancaria: “Creación del mercado de renta fija para pymes; fomento del capital riesgo (el ICO ha impulsado un fondo con 1.200 millones); nuevas líneas de avales para la internacionalización y potenciación del funcionamiento del Mercado Alternativo Bursátil, entre otras. Además, existe un consenso en la zona euro para potenciar y orientar el Banco Europeo de Inversiones hacia las pymes”.
El grifo del crédito sólo gotea
En caída libre. El porcentaje de pymes que ha intentado acceder a financiación ajena, según datos del Consejo Superior de Cámaras de Comercio, sigue cayendo desde el 51,5%, que registró en el cuarto trimestre de 2011, hasta el 24%, del cuarto trimestre de 2012 (el último del que se tienen datos, al cierre de este reportaje).
Condiciones de acceso más duras
El 93,8% de las pymes solicitó dinero para financiar circulante. Según las Cámaras de Comercio, las condiciones de acceso son más duras que en trimestres anteriores. De las empresas que solicitaron financiación en el cuarto trimestre de 2012, la obtuvieron el 68%, casi punto y medio más bajo que el trimestre anterior. En cuanto a las denegaciones de crédito, estas aumentaron, pasando del 25% al 26%. “El principal motivo aducido por las entidades financieras para la denegación del crédito a las pymes es que las garantías aportadas fueron insuficientes”, señalan las Cámaras.
Asimismo, “el volumen de financiación proporcionado por los bancos se ha reducido”, al tiempo que “se ha incrementado el coste de financiación (tipos de interés)”. Además, “los gastos y comisiones se han encarecido”; “han aumentado las exigencias de garantías y avales”, “se ha dilatado el plazo de la respuesta del banco” y “se les ha exigido a las pymes un plazo de devolución de la financiación más reducido”.
El Banco de España, en su Informe trimestral de la economía española, confirma esta situación: “Las pymes españolas siguen enfrentándose a unas condiciones crediticias mucho más estrictas que las sociedades del área del euro”.
Concursos con ‘no muy buenos premios’
Las cifras de empresas que acaban en concurso de acreedores son alarmantes. Según Axesor, las previsiones para este año es que el número de empresas en concurso aumente un 27% más que en 2012.
Ese crecimiento viene siendo así desde 2005, con más de 800 empresas en aquel año, hasta las más de 7.400 en concurso, en 2012.
Las previsiones para este año hablan de alcanzar las 9.500. Y si eso es grave, aún lo es más el dato de que más del 90% de las que entran en concurso acaban en liquidación.
Una de las causas es que la gran mayoría acude tarde al concurso, cuando su situación financiera es muy grave.
“La ley concursal no está funcionando bien: no es la mejor del mundo; los juzgados son poco ágiles y no saben mucho de empresa, y los bancos ven a las empresa en concurso como leprosos. La mayoría va cuando está casi muerta y el concurso, lo único que acaba haciendo, es enterrarla”, apunta Navarro.