Algunos aspectos a tener en cuenta:
Tipo de interés: comprueba que el tipo referencial se mantiene invariable durante todo el crédito y que las variaciones quedan bien especificadas, así como el diferencial a aplicar y si tiene algún tipo de suelo.
Ratios: hay productos que se asocian a ratios de ventas y de beneficios. Analiza bien estas condiciones para que puedas hacer frente a estas situaciones.
Intervalos: analiza si el producto está sometido a intervalos. Es decir, por ejemplo, una línea de factoring que tenga un coste hasta los 600 euros y otro diferente a partir de esos 600 euros.
Comisiones: las ponen las entidades a su criterio, con la única obligación de informar al Banco de España.