Año: 1976. Lugar: Jobra, aldea localizada en Bangladesh. Aquí nacen oficialmente los microcréditos. Su creador: el Nobel de la Paz Muhammad Yunus, entonces profesor de Economía en la Universidad de Chittagong. Su objetivo: diseñar un sistema de créditos con el que prestar servicios bancarios a la población rural pobre. Con la novedad de que no se exigen garantías. Yunus materializa su idea en el Grameen Bank, proyecto exitoso y que estimula iniciativas similares en otras partes del mundo, economías avanzadas incluidas.
En España, el préstamo empieza a tomar cierto impulso a principios de la década actual . Al igual que en otros países desarrollados, aquí se ha adaptado al contexto socioeconómico hasta tal punto, que expertos como López-Lubián, piensan que lo que se ofrece como microcrédito se aleja demasiado de su esencia primigenia. Y razón no le falta, ya que las cantidades prestadas y los plazos de devolución son mayores, al margen de dirigirse a un público más amplio. Pero las similitudes también aparecen. En ambos escenarios se trata de un instrumento de financiación no basado en el tradicional aval patrimonialista.