España es el país europeo donde los trabajadores más perciben que el tradicional horario laboral de 9 a 18 podría acabar para siempre en el entorno postpandemia. En concreto, el 40% de los españoles encuestados en un estudio internacional de Poly se posicionan en esta visión, por el 26% de la media europea.
Además, los españoles muestran una predilección por el trabajo híbrido. Algo que, sumado a los cambios en el horario laboral, podría marcar el futuro de las condiciones de trabajo. Así, el 32% de los españoles consultados consideran que trabajar tres días en la oficina y dos en casa a la semana es la opción más eficiente para las empresas en el entorno postpandemia que viviremos durante los próximos meses.
Además, el estudio muestra cómo una gran proporción de encuestados europeos querrían trabajar, al menos, un día a la semana desde casa. Sin embargo, una de las grandes preocupaciones que los mismos tienen que ver con el horario laboral que se sigue trabajando en remoto, algo que puede generar problemas de estrés y falta de conciliación.
En definitiva, y a juzgar por la opinión de más de 7.000 personas de España, Reino Unido, Francia, Alemania, Suecia, Polonia y Emiratos Árabes Unidos, el horario laboral de 9 a 18 será sustituido por un modelo más flexible. No en vano, uno de los aspectos que más valoran de trabajar desde casa es poder dormir más, organizarse de forma personal o tener más tiempo para pasar con la familia.
El interminable horario laboral español
El tradicional horario laboral español es uno de los motivos que hacen que los trabajadores del país estén más dispuestos a optar por un modelo más flexible. Tanto es así, que el problema saltó hace unos meses a la prensa internacional, de la mano de The New York Times. El diario americano dedicó un artículo a repasar los inconvenientes de las interminables jornadas de trabajo.
“El resultado de hacerlo todo a destiempo es un país cansado y empeñado en dar la espalda a los beneficios” de un horario laboral más racional, explicaba entonces David Jiménez. Un problema que, en su opinión, se comienza a dar desde las edades más tempranas. “Nuestros hijos van a la escuela hasta las 5 de la tarde, les añadimos trabajos extraescolares y los mandamos a la cama una hora más tarde que en otros países, aunque se levantan media hora antes. Es una de las razones de que su rendimiento esté por debajo de la media de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos”, explica.
Ante la problemática del largo horario laboral de los españoles, la solución más evidente pasa por reducir los descansos de comidas y cumplir con la jornada estipulada para los trabajadores. Sin embargo, en los últimos meses se viene hablando de varias iniciativas destinadas a mejorar la productividad y aumentar la conciliación.
En este sentido, la más popular es la implantación de la jornada laboral de cuatro días. Esta solución alargaría el horario de trabajo habitual, pero dejaría un día más de descanso a la semana para los trabajadores. Las empresas que están aplicando esta modalidad, donde los empleados suman 37,5 horas de trabajo semanal, ya han notado un aumento significativo en la productividad, lo que hacer crecer el debate sobre su implementación definitiva.
El horario laboral 100% flexible, la semana de cuatro días y otras soluciones para transformar el trabajo
En los últimos meses, coincidiendo con las enormes dificultades que algunas empresas están sufriendo para encontrar trabajadores, están apareciendo en el mercado laboral diferentes soluciones enfocadas a mejorar la conciliación y la productividad alrededor del horario laboral. A continuación, te presentamos algunas que podrías explorar en tu empresa.
La primera de ellas es la jornada laboral de siete días. Aunque su nombre puede resultar chocante, el procedimiento es simple: la empresa da al trabajador total libertad para escoger el horario laboral que mejor le convengan durante los siete días de la semana. Además, esta metodología también permite que los trabajadores organicen su jornada laboral en los días que mejor les convenga, entre los tres y los 6,5 días.
Otra de las soluciones más comentadas en los últimos meses, y que multitud de grandes empresas como Telefónica han comenzado a aplicar, es la reducción de la semana laboral a cuatro días. Eso sí, no es gratis. En la mayoría de los casos, los empleados que decidan aplicar la semana laboral de cuatro días solo trabajarán ocho horas por jornada entre el lunes y el jueves. Es decir, 32 horas semanales. De las 5,5 horas restantes en su contrato, la compañía podría bonificar una, por lo que el trabajador dejaría de cobrar el salario correspondiente a 4,5 horas semanales.
Por último, y de forma más residual, también aparecen nuevas soluciones enfocadas a mejorar el horario laboral de los trabajadores. Una de las más extrañas consiste en permitir a los empleados coger vacaciones de manera ilimitada. Sin embargo, solo las empresas que trabajan por objetivos y no requieren de una atención al cliente constante pueden permitirse ofrecer días libres adicionales a sus trabajadores, por lo que su aplicación en España es algo que todavía queda lejos.