Para muchos, la profesión de influencer parece reservada para los creadores de contenido más jóvenes. Aunque es lo habitual, esta regla no se cumple en todos los casos. El número de estrellas de las redes sociales con edades avanzadas se ha multiplicado en los últimos años, porque la gracia y el salero no están reñidos con la fecha de nacimiento.
Incluso en las redes sociales enfocadas hacia un público más joven, como TikTok o Instagram, el número de abuelos que triunfan como influencer es cada vez mayor. Mucho tienen que ver en ellos los nietos de estas estrellas de Internet, que en la mayoría de los casos están detrás de las cuentas más seguidas en el nicho del humor y el entretenimiento.
Su ejemplo es una prueba de que el talento más senior también es apto para triunfar en el mercado de las redes sociales. Si crees que estás mayor para dedicarte profesionalmente a ello, los ejemplos de estos creadores de contenido pueden servirte para quitarte de la cabeza la idea de que ser influencer y ganar (mucho) dinero en Internet es cosa de las nuevas generaciones.
Los abuelos que más dinero ganan en redes sociales trabajando como influencer
La primera posición del ranking la ocupa Pauline Kana, una norteamericana de 95 años que triunfa en TikTok ofreciendo a sus seguidores contenido humorístico. La anciana cobra más de 17.500 dólares de media por cada publicación que promociona en su perfil, una cifra similar a un influencer joven de primer nivel.
Aunque los 23 millones de seguidores que Kana acumula en TikTok le convierten en la influencer senior más exitosa, su caso no es tan único como parece. De cerca le siguen Lynn Yamada Davis (73 años), Joe Alington (88), Lili Hayes o Charles Mazo, todos creadores de contenido que han encontrado un trabajo en las redes tras su jubilación.
En Instagram, las cifras son más modestas, pero también interesantes. A sus 90 años, la norteamericana Helen Elam cuenta con 3,3 millones de seguidores, y cobra alrededor de 8.700 euros por colaboración pagada. Sin duda, una actividad divertida que permite a esta influencer vivir una jubilación de oro.
En España, los casos son más contados, aunque también existen. Una de las influencer mayores más conocidas es Luisa Cantero, abuela del actor Miguel Ángel Muñoz, que se hizo famosa en Instagram durante la pandemia. A sus 95 años, Cantero ha aprovechado su tirón en esta red, donde acumula 365.000 seguidores, para lanzar una tienda online con camisetas y juegos para personas mayores.
En el lado contrario, los becarios mayores de 60 años
En el lado opuesto a las historias de éxito de las personas mayores que triunfan en sus facetas de influencer, una nueva tendencia parece estar creciendo en el mercado laboral español. Se trata de los becarios mayores de 60 años, que se han duplicado en el último año debido a la falta de ofertas laborales para los trabajadores más mayores.
En concreto, la Seguridad Social contabilizó el pasado mes de junio 69 becarios mayores de 64 años en España. Una cifra residual pero récord en el país, que hace un año contaba con la mitad de trabajadores mayores bajo un contrato de aprendizaje, formación y práctica. Con respecto a los becarios con una edad de entre 60 y 64 años, la cifra es mayor: 870 trabajadores en el mismo mes.
Entre las principales causas del fenómeno de los becarios mayores de 60 años, se encuentra el difícil acceso para estos profesionales al mercado laboral. La oferta de empleo se concentra en otros estratos de población, con más recorrido para desarrollar una carrera dentro de la empresa y en la mayoría de los casos mejor formados en materias claves como la digitalización.