La rentabilidad de Netflix vuelve a estar en entredicho. La plataforma de contenidos audiovisuales en streaming ha reconocido el fracaso de su nuevo modelo de negocio, que pasaba por incorporar publicidad a su plataforma, apenas dos meses después de ponerlo en marcha. Se trata de una noticia muy mala para la compañía dirigida por Reed Hastings, y que pone en serias dudas la viabilidad del gigante audiovisual.
Según ha publicado el medio Digiday, Netflix se ha visto obligada a devolver la inversión en publicidad a los anunciantes después de no alcanzar el objetivo de visualizaciones mensuales que desde la compañía habían prometido a estos. En algunos casos, este objetivo no ha alcanzado ni siquiera el 80%.
¿La causa? Al parecer, el plan que lanzó Netflix hace dos meses, y que incluía algunos anuncios a cambio de una tarifa reducida, no cuenta con el número de suscripciones suficientes como para alcanzar los objetivos de visualizaciones que la compañía de streaming había prometido a sus anunciantes. Un error de cálculo que puede salir muy caro a la empresa, en medio de una profunda crisis motivada por varios factores.
La crisis de Netflix y su fracasado nuevo modelo de negocio
2022 termina de la peor manera para Netflix, que ha intentado sin éxito recuperar la senda del crecimiento haciendo importantes cambios en su modelo de negocio, que han terminado por ser un fracaso. En este sentido, los malos datos comenzaron en el primer trimestre del año, cuando la compañía perdió 200.000 clientes y su valoración bursátil llegó a caer un 25%.
El objetivo de la compañía pasaba por sumar dos nuevos millones de cuentas en el primer trimestre de 2022, lo que demuestra que los malos resultados de la empresa de contenidos en streaming no esperaba un fracaso tan importante. Ante esta situación, la compañía dirigida por Reed Hastings anticipó algunos cambios en su modelo de negocio, enfocados a recuperar la senda del crecimiento.
Terminar con las cuentas compartidas
El primero de ellos tuvo que ver con las cuentas compartidas. En realidad, solo los miembros de una unidad familiar pueden compartir una cuenta en su plataforma, como indican sus condiciones de uso, aunque lo cierto es que sus servicios suelen dividirse entre amigos o familiares que no formen parte del hogar.
Ante esta situación, la compañía valoró diferentes posibilidades para terminar por completo con estas prácticas, que restan a Netflix un beneficio de alrededor de 500 millones de dólares anuales. Sin embargo, el gigante audiovisual debería tener cuidado, ya que estas medidas podrían generar una reacción hostil por parte de sus clientes y provocar el efecto contrario.
El fracaso de su plan con publicidad
El principal cambio en el modelo de negocio de Netflix para recuperar el camino del crecimiento fue la actualización de sus tarifas y la incorporación de publicidad. Así, la compañía estrenó el 10 de noviembre en España una nueva tarifa reducida de 5,49 euros mensuales. Los usuarios que decidan acogerse a la nueva tarifa de Netflix pueden disfrutar de todo el catálogo de su plataforma a una calidad máxima de 720p/HD.
Eso sí, deberán visualizar alrededor de 5 minutos de publicidad cada hora, una novedad con la que la compañía esperaba ingresar hasta 8.000 millones de dólares anuales a través de los anunciantes… Pero que, por el momento, parece inviable.