Cada vez más compañías están instalando placas solares en sus sedes. En ello influye el ahorro en la factura de la luz, hasta un 50% anual, y la progresiva caída del precio de la infraestructura necesaria, que baja un 5% cada año. Todo ello, sumado a que las placas solares tienen una vida útil de unos 30 años, configuran un sistema que ya es rentable en España.
De manera preferente, la instalación de placas solares se ha venido realizando en el parque de viviendas español. El crecimiento de esta industria ha experimentado un nuevo impulso tras la pandemia, debido, en parte, a que “la gente que no se ha visto perjudicada en su trabajo ha ahorrado dinero para montar la instalación, que cuesta, de media, entre 4.000 y 6.000 euros. Además, cada vez más ciudades aplican desgravaciones fiscales en el IBI”, tal y como señala la Unión Española Fotovoltaica (UNEF).
Regresando al mundo de la empresa, la instalación de placas solares también está creciendo de manera interesante durante los últimos meses. En ello tiene que ver el desarrollo de la tecnología, así como que se trata de una energía renovable y limpia y que es la forma más barata de producir energía en los países con gran presencia de sol, como es el caso de España. “Todos estos beneficios se traducen en una importante mejora de su competitividad, sostenibilidad y resiliencia, elementos claves para cualquier empresa”, explican desde Opengy, una compañía especializada en soluciones de suministro energético renovable.
Además, “cada vez más empresas sitúan la sostenibilidad como una de sus principales señas de identidad. Además de demostrar ser responsables y mostrar su compromiso con el respeto del medioambiente, estas compañías exhiben una imagen de innovación y resiliencia, adaptándose a las nuevas tendencias energéticas”, tal y como explica Manuel de Castro, CEO de la compañía.
¿Cómo beneficiarse de una instalación gratuita de placas solares en tu empresa?
“Si la empresa está interesada en beneficiarse de una energía limpia y barata, pero no desea acometer la inversión en una instalación de placas solares, ni soportar los gastos de operación y mantenimiento, puede firmar un contrato PPA”, afirman desde Opengy. Se trata de un contrato de compraventa de energía eléctrica a largo plazo establecido entre un generador y un consumidor. El generador es el propietario de la instalación de generación fotovoltaica y el que hace frente a la inversión inicial y a los gastos de operación y mantenimiento.
Por otro lado, el PPA está asociado a una instalación de placas solares destinadas al autoconsumo -como puede ser el de una empresa-, al finalizar el contrato, “el consumidor pasa a ser propietario de la instalación a un precio preacordado, que puede ser cero euros, de forma que seguirá disfrutando de una energía limpia y barata durante el resto de su vida útil”, explican.
Bajo esta fórmula, instalar placas solares en tu empresa puede salirte gratis, beneficiando a tu empresa con un sistema de energía limpia sin necesidad de acometer ningún tipo de gasto de mantenimiento, y sin computar en el balance de la empresa.