Es importante que a la hora de presentar el plan, hayas analizado muy bien cuáles son tus debilidades y de qué manera piensas solucionarlas. En este sentido, también es importante que identifiques otras posibles propuestas similares y cómo han afrontado la idea que tú propones.
“ En el año 2002 salió al mercado un proyecto similar que ofrecía un servicio de asesoramiento al expatriado. Pero a diferencia de aquel, nuestra propuesta no se limita a la gestión de trámites, sino que abarca el acompañamiento total del afectado”.
Y nunca está de más establecer un plan B.