En plena época de incertidumbre y escasez de trabajadores cualificados para las empresas, las redes sociales se han convertido en un canal fundamental para conseguir atraer al talento más joven. La cercanía, la inmediatez y la posibilidad de filtrar las búsquedas por tipos de perfil son los puntos fuertes de esta tendencia, que parece haber llegado para quedarse.
Así, además de las ya tradicionales ofertas de empleo publicadas en LinkedIn, los departamentos de recursos humanos están utilizando las redes sociales menos laborales para atraer y captar trabajadores jóvenes y cualificados a sus plantillas. TikTok o Instagram son las más utilizadas, gracias a la facilidad que ofrecen para construir comunidad y establecer un canal de comunicación directo y personalizado con la audiencia.
Tal y como explican desde BBVA en un reciente reportaje de El País, las redes sociales se han convertido en una “vía fundamental para mostrar la cultura empresarial y resolver inquietudes y dudas que un potencial candidato puede tener. De este modo, se crea una relación de confianza entre los candidatos y las empresas mucho antes de haber contacto directo entre ambas partes”, afirman.
¿Qué valoran los trabajadores de la generación de las redes sociales?
Así, las redes sociales se han convertido en un complemento perfecto para las herramientas propias de la captación de talento, sobre todo entre los profesionales más jóvenes y cualificados, una generación que está comenzando a valorar mucho más su felicidad y satisfacción personal que las anteriores, por encima incluso de las condiciones salariales.
En este sentido, un reciente estudio de Regus muestra cómo más de la mitad de los trabajadores de la generación de las redes sociales (la Generación Z, los nacidos a partir de 1997) quiere trabajar desde casa, mientras que el 43% afirma que estaría dispuesto a dejar su empleo si no ofreciera un buen equilibro entre la vida personal y la laboral. Además, el 55% espera que la semana laboral de cuatro días, que ya se ha probado en los últimos meses, se convierta en la norma general del mercado de trabajo en algún momento.
Estos datos son una buena muestra de la dirección de los trabajadores más jóvenes, y sirven para explicar tendencias como el job hopping. Se trata una opción cada vez más recurrente, resultado de la ausencia de posibilidades de promoción interna en las compañías; y, por otro lado, de la necesidad de nuevos estímulos en la vida laboral de los trabajadores más jóvenes, criados y educados bajo un paradigma diferente al de las generaciones anteriores.
En este contexto, los nativos digitales optan por el job hopping como fórmula para progresar en sus carreras, cambiando de compañía cada uno o dos años. Se trata de una cuestión de lo más importante, teniendo en cuenta las dificultades que están encontrando algunas compañías para incorporar a profesionales de la generación de las redes sociales a sus plantillas.