“Hemos invertido 41.000 euros y muchas horas de trabajo –sólo programar la web les ha llevado 4.000 horas– para asegurarnos de que no hay nada igual en el mercado. Es cierto que existe alguna que ofrece un servicio similar, pero son más básicas y complicadas de utilizar”, afirma. Su modelo es diferente: “Pedimos una cantidad muy pequeña al cliente para llevar a cabo el litigio –menos de 25 euros–. Si ganamos, el cliente tiene la posibilidad de hacernos una donación”.
Tienen dos tipos de clientes: el sector vacacional y el corporativo. “Nuestro primer cliente internacional, con más de 40.000 empleados, se acaba de asociar”, dice Van Bokhoven, que espera recibir unos 11.000 peticiones en ocho países, lo que de medía les reportaría unos 225.500 euros, más las donaciones.
