EL GOOGLE QUE AYUDA A PLANTAR ÁRBOLES
Ecosia es un motor de búsqueda similar a Google pero creado exclusivamente con un objetivo medioambiental: el dinero que consiguen por publicidad lo destinan a plantar árboles en los lugares del mundo donde más se necesiten. Dicen que ya han plantado 87 millones de árboles en lugares como Etiopía, Brasil, Indonesia, España y otros puntos críticos para la biodiversidad. Pero además de ser respetuosos con el medioambiente también lo son con las personas que los escogen como buscador: dicen que no se quedan con ningún tipo de dato personal de sus usuarios y que tampoco utilizan herramientas para rastrear las búsquedas. Todo está cifrado con SSL.
UN ROBOT PARA LA CRÍA DE GALLINAS
La startup francesa Tibot Technologies, especializada en robótica para empresas avícolas, ha desarrollado entre sus productos un robot que ayuda a estimular el movimiento de las gallinas que se crían fuera de jaulas, impulsándolas así a moverse, lo que estimula su crecimiento y engorde. Este robot granjero, que tiene la misma apariencia de los aspiradores caseros, lleva integrado un rascador que airea la basura para evitar la fermentación, con lo que mejora también la salud de las aves y ayuda a las empresas del sector a ajustarse a las exigencias normativas que tratan de garantizar el bienestar de estos animales.
PARA QUE NUNCA TE FALLE EL FLUJO DE CAJA
Fluidly es la herramienta que puede acabar con la mayor de las pesadillas de cualquier empresa, y particularmente de las pymes. Esta fintech con sede el Londres ayuda a predecir y optimizar el dinero efectivo, gracias a un software basado en aprendizaje automático. Con esta información, las pymes, que son sus principales potenciales clientes, pueden tomar mejores decisiones financieras y anticiparse al colapso monetario. Una idea que ha recibido 5,6 millones de euros por parte de un fondo de la Royal Bank of Scotland.
UNA NUEVA FORMA DE ALQUILAR Y COMPARTIR ROPA
Fundada Oslo, FJONG es una startup que quiere cambiar por completo la forma en la que funciona el negocio de la moda y contribuir así al cuidado del medioambiente. A través de su plataforma sus usuarios pagan una suscripción mensual con la que pueden alquilar las prendas que les gusten y poner a alquilar las propias que quieran compartir. Un mix con el que consigue una oferta original, diferenciándose así de lo que viene siendo habitual en las plataformas de intercambio de prendas entre particulares (que se centran en comprar y vender) y de las suscripciones, que proponen el acceso a prendas de una empresa. Cuenta con más de 5,000 prendas de mujer nuevas y de diseño vintage de más de 300 marcas en todo el mundo. La empresa se encarga de hacer una selección de lo que entra o no en la oferta, del envío y de la limpieza de las prendas. Las usuarias, además, reciben información detallada de la frecuencia con la que se alquilan sus artículos y cuánto han ganado. Los beneficios se reparten a partes iguales entre la empresa y la propietaria de la ropa.