“Nuestro patentado sistema a nivel mundial no necesita máquinas, sólo las manos. Es más rápido que los tradicionales (40 segundos frente a los 2,5 minutos de la mayoría), da una terminación más elegante (tipo libro en lugar de cuadernillo) y permite personalizar a coste bajo, desde una unidad”, explica Antonio Galván, socio fundador de bindo!, una empresa de Cádiz en la que se han invertido unos 200.000 euros.
El desarrollo –en el que también han participado Fernando Miralles, Francisco Javier Julbes, Marta Fernández y Fernando Sánchez– ha sido complejo: “Desde 2003 se han hecho tres moldes distintos, mejorando en cada uno hasta el actual. Hasta finales de 2008 no tuvimos las piezas del sistema de encuadernación para poder venderlo”, dice Galván.
La compañía trabaja con más de 350 puntos de venta (copisterías) y más de 75 distribuidoras provinciales y/o regionales de varios grupos importantes de papelería en España. “Lo importante será ver la evolución este año, ya que el esfuerzo se ha hecho en montar una red de distribuidores de papelería y también hay que darlo a conocer en otros países”.