Jesús Sánchez ya cuenta con una patente. Ahora busca inversión para que el primer prototipo, inspirado en los funiculares, vea la luz.
¿Escaleras mecánicas adaptables a personas con movilidad reducida? Jesús Sánchez, investigador del Campus de Terrassa de la Universidad Politécnica de Catalunya, ha dado con un diseño que no sólo las hace posibles, sino que las hace más baratas que las actuales. El concepto inicial sobre el que ha trabajado es similar al diseño actual de las escaleras. “La idea de partida es que los usuarios sin limitaciones de movilidad puedan utilizar la escalera mecánica sin ninguna diferencia con respecto a las escaleras actuales. Sin embargo, cuando un usuario con movilidad reducida que se desplaza en silla de ruedas necesite utilizar la escalera, consiga tras presionar un botón que tres de los escalones se muevan verticalmente y se conviertan en una plataforma plana a la que pueda acceder con su silla de ruedas. Después de que el usuario se haya acomodado en la plataforma de la escalera, con la silla perfectamente colocada, la escalera se pondrá en funcionamiento hasta llegar al final del trayecto. Cuando el usuario abandone la instalación, la plataforma se volverá a convertir en tres escalones independientes”, explica. El diseño contempla, además, una serie de dispositivos que permiten el uso de la escalera por parte de personas con discapacidades auditivas o visuales”, añade.
Y el diseño garantiza un ahorro energético y económico. El servicio que ofrece es el equivalente a dos escaleras mecánicas convencionales, una para subir y otra para bajar, pero el consumo eléctrico y su coste resulta un 35% inferior al de las dos escaleras mecánicas convencionales necesarias para dar el mismo servicio. “El ahorro se consigue gracias al diseño de la escalera en forma de circuito cerrado en el que el retorno de la escalera es paralelo al tramo principal. Se utiliza la escalera en su recorrido ascendente y descendente… como un funicular”.
