Han esperado a la celebración del Día Mundial del Agua- el 22 de marzo- para hacer el lanzamiento oficial de su primer artículo: una bolsa de plástico donde recoger el agua que desperdiciamos cada día en la ducha antes de que se caliente. Una media de tres litros de agua por persona que puede posteriormente reutilizarse para regar las plantas, fregar los suelos o tirarla por el inodoro en lugar de vaciar los seis litros de agua de la cisterna.
El siguiente artículo será ecopó, un utensilio de cartón para recoger los excrementos de los perros. “Nuestra mayor innovación es aplicar el sentido común para detectar necesidades o problemas que todo el mundo puede apreciar y sobre los que nadie actúa”, definen su filosofía desde esta joven empresa que integran dos diseñadores, Javier Esteve y Víctor Pinto, y un profesional de marketing, Suso Chulvi. Los tres compartían desde los tiempos de la Universidad una misma inquietud: “reflexionar sobre cosas sencillas fácilmente mejorables”.
Artículos patentados
Más que revestirse de genialidad sus desarrollos de mercado se acogen a la sensatez proponiendo cambios de hábito a favor de conductas respetuosas para la convivencia social y el medio ambiente. Más complicaciones que la concepción y el diseño parece que les acarrea patentar los artilugios. “Además de ser algo farragoso, no es barato”, dicen. Patentar la bolsa de plástico que saldrá al mercado al precio de 10 € les ha supuesto más de 14.000€. Dar el siguiente salto y arrogarse el derecho de prioridad para vender en 148 países les supondría entre 60 y 70.000 € más, inversión que tendrá que esperar hasta ver las cifras de la facturación.
Para la RSC
El primer acuerdo lo han suscrito con Acciona Agua empresa que, en honor a su compromiso con la sostenibilidad y la innovación, luce la bolsa de Esferic en la home de su web y ha adquirido un lote como regalo para sus clientes. Explotar la vía de la Responsabilidad Social Corporativa personalizando los artículos; ganar distribuidores en exclusiva y la venta directa a través de su web serán inicialmente los principales canales de ingresos de la marca que persigue imprimir en sus consumidores el sello de persona socialmente responsable.
En búsqueda de financiación
Para cuando concluya el año confían en haber alcanzado una facturación de 500.000 € y haber alumbrado otras cuatro ideas que tienen en la recámara. Para ejecutar sus planes están en busca de financiación bien a través de inversores particulares, bien mediante crowfunding, mecenazgo que a ellos mismos les gustaría ejercer con algunas de las excepcionales ideas que les llegan diariamente por correo electrónico. De momento tendrán que centrarse en la evolución de su propia compañía y encarar la distribución internacional, que comenzará por Europa.
