Javier Pons es emprendedor por ósmosis, un caso, aunque no lo creas, bastante habitual. Resulta que Pons tenía una agencia de publicidad en La Coruña (Mira la rana) y entre sus clientes, como es habitual en un negocio de este tipo, había hoteles, restaurantes y tiendas. Como te podrás imaginar, estos clientes tenían un problema común: atraer más consumidores.
Y hablando con sus clientes, Pons entendió que había un común denominador en ese problema: el reto no está en conseguir más clientes (léase turistas), sino en atraer los que ya llegan -que, aprendió, son más que suficientes– hacia sus respectivos negocios sin pisarse.
Contra la especulación
“Cuando grandes ayuntamientos dicen que no quieren más turistas y que
quieren regularlo, te quedas
atónito. Pero, rascando, te das cuenta de que muchos comercios, por culpa del turismo, terminan pasándolo mal. Me refiero a aquellos negocios de barrio a los que no llega el turista, pero sí llega la especulación inmobiliaria.
Si quiero poner una tienda en un barrio
de Barcelona, el precio va a ser dos o tres veces superior que si quiero ponerla en el centro de La Coruña”, explica Pons. Así que se le ocurrió una solución.
“Hemos diseñado una aplicación que permite al huésped de un hotel reducir el coste de su estancia y conseguir incluso que
le salga gratis en función de los gastos que realice en comercios y locales asociados de la ciudad que visita o sus alrededores”, explica. “En lugar de aplicarle un descuento sobre el producto, el cliente paga el precio marcado en tienda y se le descuenta un porcentaje de su gasto en el hotel”, dice.
“Si un cliente compra una camisa que cuesta 100 euros, con un descuento
del 15%, pagará los 100 de la prenda y acumulará 15 euros en su cuenta, cantidad que le será abonada por UnSheeping al día siguiente del check-out en su hotel. Es el comercio el que corre con el gasto del coste promocional, ese 15%, más otro 5% adicional que iría destinado
a pagar este coste promocional a éxito, que UnSheeping comparte con el hotel”, añade.