Con la filosofía de “las cosas siempre se pueden hacer de otra forma”, estos dos emprendedores –y cuñados, para más señas–, Nicolás López y José María Marticorena, decidieron innovar en el mercado de las bebidas espirituosas con nuevos formatos de consumo.
Y la idea no les llegó por inspiración divina. “Viene de la observación de los hábitos de consumo de los turistas extranjeros en Canarias y Levante y de cómo el formato de consumo se podría adaptar a los nuevos hábitos de consumo de la sociedad española, que están cambiando a un ritmo vertiginoso con motivo de la fuerte crisis económica que sufrimos”, argumenta Marticorena, que ha sido alto directivo en una compañía del sector alimentación de gran consumo.
Oferta para la demanda
Con el estudio y análisis de las oportunidades de negocio, Marticorena se unió a su cuñado –propietario de una compañía de outsourcing informático– para emprender en el sector de la distribución y comercialización de bebidas espirituosas en envases PET, bajo la marca Cimin Dreams.
“Es un nuevo tipo de envase, plástico PET, y un nuevo formato más reducido de botella, de 35 cl., que se adapta a los nuevos hábitos de consumo: en lugares al aire libre (el denominado ‘botellón’), unidades de venta más reducidas buscando precios unitarios menores, entre otros”, explica.
Entre los dos socios han invertido unos 250.000 euros, que han destinado, principalmente, al desarrollo de la marca, envases y diseños. La previsión de facturación que se han marcado para el primer año es la de superar 750.000 euros.
