Si acostumbras a leer periódicos digitales seguramente te habrá saltado más de una vez una alerta sobre el riesgo de que las abejas desaparezcan –debido al abuso de pesticidas, pérdida de su hábitat natural y otras causas– y lo que supone para la biodiversidad, tratándose de una especie que participa activamente en la polinización de las plantas. Hay estudios que dicen, incluso, que moriríamos de hambre si estas no existiesen. O que sin polinización los ingresos de los cultivos agrícolas caerían en torno al 41%.
Pues bien, parece que la solución a este gran problema está en el Internet de las cosas. En este caso graciasa unas colmenas inteligentes que ha ideado el grupo alemán de telecomunicaciones Deutsche Telekom y que ha implantado en los alrededores de su sede en Bonn. Están equipadas con tecnología IoT y conectadas a una red de máquinas y sensores que recopilan información sobre la temperatura, humedad, nivel de llenado y peso de los paneles y sonidos. Incluso si las abejas están sanas o cuál es el comportamiento de las mismas en los paneles. Todos estos datos los recibe el apicultor local en una aplicación móvil para que pueda realizar una gestión de las colmenas de forma mucho más eficiente y sin tener que estar revisándolas continuamente. Además, con esta tecnología se mejora el entorno natural de las abejas y se reduce su intrusión en el mismo.
No es el primer proyecto de Internet de las cosas enfocado a preservar animales en peligro de extinción. Hace unos años, ya se aplicó para la conservación del visón europeo, a través de la plataforma SmartFIEB apoyada por otra teleco, en este caso Telefónica.
SEGURO QUE TE INTERESA
Así se aplica el Internet de las cosas al campo