Academias de apoyo. La nueva ley de Educación (LOMCE) establece la obligatoriedad de realizar pruebas de evaluación al final de primaria y de la ESO para poder pasar a los ciclos siguientes, lo que puede abrir la posibilidad de crear academias especializadas en la preparación de este tipo de pruebas, al igual que en la preparación de la prueba de reválida que también será obligatoria.
Emprendimiento y prevención para jóvenes. En la Formación Profesional se introduce la formación en prevención de riesgos laborales y en la formación secundaria en general se promueve el emprendimiento. Estas son dos áreas que van a requerir de especialistas nuevos.
El e-learning preuniversitario. La progresiva digitalización de la educación se extiende no sólo al terreno universitario o postuniversitario, como ocurría hasta ahora, sino incluso a la formación secundaria y al Bachillerato, ya que la nueva ley ya abre la vía para cursar a distancia durante esta etapa asignaturas optativas que no existan en el centro presencial.
Agencias y asesorías de calificación en excelencia. La LOMCE contempla el reconocimiento honorífico de los centros educativos en función de su calidad y su excelencia académica, lo que puede suponer una oportunidad de negocio para asesorías y consultoras especializadas en la optimización de la calidad.
