“Comencé a explorar otras pasiones e ideas y enseguida me di cuenta que en Estados Unidos no existía el concepto de postre de gelatina listo para comer, muy popular en mi país”, subraya. Con unos ahorros de 35.437 euros, se puso un delantal y, siguiendo la receta tradicional de su madre, comenzó la producción de este sabroso postre, de alto contenido proteico, y muy saludable, “por lo que es ideal para la población estadounidense, con un índice de sobrepeso de más del 64%“.
Para darse a conocer, comenzó ofreciendo muestras del producto en supermercados y el boca-oído funcionó muy bien.
Su empresa Lulu’s Dessert Corporation produce 50.000 postres al año (también comercializa arroz con leche y flanes), lo que le reporta unos ingresos de 5,6 millones de euros y se encuentra en el top ten de las empresas de origen latino de más rápido crecimiento en EEUU. Además, Sobrino ha sido galardonada con varios premios por su labor emprendedora.
