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31 May, 2023

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Badi: el ‘marketplace’ de pisos compartidos que revoluciona el ‘propTech’

Forma parte de nuestra tercera ‘Lista Emprendedores’, con las mejores startups innovadoras que ya están triunfando o lo van a hacer a corto plazo.

Badi: el 'marketplace' de pisos compartidos que revoluciona el ‘propTech'

Pierre es un apellido ligado al éxito en el emprendimiento. Carlos Pierre –primo de Óscar Pierre, fundador de Glovo– es el fundador de Badi, un marketplace de pisos compartidos, que ha conseguido captar la atención de inversores nacionales e internacionales en poco más de dos años de vida.

Desde 2015 que lanzo Badi, Carlos Pierre ha conseguido 300.000 euros de inversores como Marc Ingla, Mangrove Capital Partners y Didac Lee; en mayo de 2016, 1 millón más, también de Mangrove Capital; en julio de 2017, otros 3 millones, también de Mangrove Capital Partners y de Enrique Dubois, Eneko Knorr y Atresmedia, y en febrero de este año, una serie A de 10 millones de dólares (unos 8,4 millones de euros) del gigante Spark Capital.

“Badi –que forma parte de nuestra tercera ‘Lista Emprendedores’ con las startups españolas más innovadoras– conecta a gente que tiene una habitación libre con alguien que busca una para vivir”, resume Pierre, en pocas palabras, su idea de negocio, que recuerda cómo surgió: “Trabajaba de auditor en PwC en Barcelona, pero vivía en San Cugat, a unos 20 minutos. Cada día tenía que coger transporte público. Un día decidí que quería vivir en el centro de la ciudad. Empecé a buscar un piso de alquiler, pero con mi salario era imposible permitirme un piso completo”.

La búsqueda le permitió conocer el mercado. “Hay un 25% de la población que no se puede permitir alquilar ni comprar una vivienda completa. Porque las ciudades crecen muy lento comparado con la demanda, que no para de crecer. Cada vez hay más gente, sobre todo, de entre 18 a 38 años que quiere vivir en el centro. Como la demanda no para de aumentar, los precios del alquiler suben. Eso está pasando en las ciudades más importantes del mundo. La única solución es aprovechar todos los espacios vacíos en el centro. Y eso significa compartir piso. Yo estaba así y empecé a buscar pisos compartidos”, señala Pierre (tercero por la derecha, en la tercera fila, en la foto), que desde el primer momento no ha buscado volumen de usuarios sino ofrecer la mejor experiencia posible.

En su opinión, las plataformas de clasificados del sector inmobiliario que existen en la mayoría de países “tienen un formato anticuado y obsoleto. Con Badi mejoramos la experiencia de usuario y le añadimos una funcionalidad, que, en el caso de compartir pisos, es clave, y es incluir los perfiles personales”.

En septiembre de 2015 lanzan una primera versión. “Los primeros meses en una startup es como estar en un desierto. En principio, lanzar significa hacer lo que puedas con lo que tienes. Muy diferente a hacerlo ahora con 10 millones de dólares. Al principio, da igual el número de usuarios que entren y se registren. Lo importante ahí es conseguir que esos 100 se conviertan en 100 personas que realmente van a anunciar o a encontrar una habitación. Por eso, no buscábamos tanto el volumen, sino que tuvieran una buena experiencia de usuario, que es justamente por lo que nacemos y creemos que es lo que les falta a las páginas de clasificados. Empezamos a adquirir poco a poco y a controlar muy bien la experiencia de usuario. Una parte compleja es que al ser un marketplace, si no crecen las dos partes al mismo tiempo, entonces tienes un problema. Porque si alguien entra y no encuentra habitaciones o no encuentra posibles inquilinos, la experiencia de usuarios no será buena. Lo que intentamos siempre es adquirir primero oferta (gente que sube una habitación) y, poco después (pero sin esperar mucho), la demanda (gente que busca una habitación). Empezamos con eso y después de que entraran en contacto las dos partes, les preguntábamos sobre qué les había parecido la experiencia. Y hemos ido mejorando poco a poco”, explica Pierre.

El perfil de los clientes de Badi son particulares, tanto propietarios como inquilinos. “Intentamos no contar con las agencias para publicar anuncios porque entendemos que van a añadir unos costes innecesarios, por eso nacimos como marketplace sin intermediarios. La idea es que una persona vea el precio de una habitación y sea ese el precio que va a pagar. En el caso de España, un 70-75% son inquilinos, el resto está dividido entre propietarios que viven en el piso y propietarios que no viven en él y quieren alquilarlo”, afirma Pierre, que apunta que ese perfil es diferente según el mercado: “Por ejemplo, en países del sur de Europa, normalmente, la gestión la llevan los inquilinos que tienen el permiso de los propietarios, que firman un contrato y se desentienden un poco. En el norte de Europa, normalmente, los propietarios son quienes llevan la gestión del día a día y quieren saber quién entra y quién sale de cada una de las habitaciones. En Londres, por ejemplo, hay un porcentaje más alto de anunciantes que sean propietarios y no inquilinos”.

Badi opera en España e Italia y en los próximos meses abrirán en varias ciudades clave europeas. “Hay ciudades con mucho volumen de alquiler de habitaciones, como Londres, París, Berlín o Ámsterdam, y también, otras en las que estamos creciendo orgánicamente”. Y también este año va a lanzar nuevas funcionalidades que mejorarán aún más la experiencia de usuario de la plataforma.