Después de trabajar varios años para una empresa catalana que daba servicio fotográfico de bebés en hospitales, María Martín decidió establecerse por su cuenta en Madrid. Así, acude por encargo ya sea a maternidades o a domicilios privados para inmortalizar los primeros instantes de vida de los niños. “En los hospitales, el servicio tiene que ser muy rápido, para no molestar, y resulta algo más agresivo, porque no te esperan”, asegura aunque reconoce que los padres están encantados con tener un recuerdo de ese instante.
Como en la mayoría de negocios de este sector, Mifotógrafa.com se beneficia mucho del deseo de originalidad: “Que vayan en tu nombre a hacerle fotos al hijo de unos amigos o familiares es algo que hace mucha ilusión a los padres”. Además, “el tema bebé es el más rentable, porque hay trabajo todo el año”.