Tras el boom del pádel, la vela, la escalada, el submarinismo, el ciclismo… asistimos ahora al uso de la bicicleta en las ciudades como medios de transporte. De ahí la eclosión de tiendas de bicis y puntos de alquiler en lugares estratégicos de las grandes urbes. Pero es un fenómeno que se empieza a saturar en algunas. Conviene buscar nuevos conceptos relacionados con éste y otros fenómenos deportivos.
Piensa, por ejemplo, en la personalización de bicis con artículos únicos (de diseño propio) o el uso de materiales reciclados de cualquier artículo deportivo para crear conceptos de decoración, como Skate-home.com (muebles con tablas de skate) o dVelas (con velas de barco recicladas). Y, por supuesto, las tiendas-taller: que permitan al cliente crear su propio producto con piezas de la tienda. Por seguir con el ejemplo de las bicis, la norteamericana Bici713 ofrece a sus clientes una estructura y les deja que ellos mismos se la terminen con piezas de la tienda (que dan más margen que la venta de la propia bici). La idea es alejarse de la competencia de bajo precio de las grandes superficies.
RAMONA BARCELONA
Si la mayoría intenta aprovechar el tirón de la bici urbana vendiendo o alquilando bicicletas, los fundadores del original comercio Ramona Barcelona lo hacen con productos de diseño para personalizarlas. “Artículos de moda que estéticamente sean atractivos sin perder la funcionalidad, como el bolso alforja, que es nuestro producto estrella. Un bolso para llevar cosas cuando estás en marcha y que puedas utilizar después como cualquier otro porque, estéticamente, es un producto de moda”, explican Llúcia Bernet y Daniel Sluckis fundadores de este comercio.
La idea era diferenciarse del resto de la oferta del mercado. “La mayoría de los complementos que se venden para las bicis son productos deportivos. Nosotros venimos del mundo del diseño y queríamos ofrecer algo distinto. Un timbre diferente, una cesta original… Son productos orientados a quienes utilizan la bici como medio de transporte, de forma cotidiana y para moverse por la ciudad. El objetivo es que cumplan con dos requisitos: estética y funcionalidad”.
El punto de venta
“El canal también es fundamental. Hay productos que la gente necesita que se los expliques. Nosotros abrimos una tienda online en 2011 y al año siguiente la física, que ahora mismo es la que tiene más peso. Se retroalimentan muy bien”.