Esta idea, estamos convencidos, supondrá un gran consuelo para muchos consumidores. ¿Estás dispuesto/a a que tus nietos jueguen con un extraño utensilio vibrante descolorido que no te atreviste a tirar a la basura en su día? Lovehoney.co.uk quiere ahorrar a los usuarios de juguetes eróticos la potencial vergüenza de tirar sus juguetes a la ba­sura (artículos, que, por cierto, hay que reciclar: el plástico, al amarillo; y si es eléctrico, tienes que llevarlo a un punto limpio). Bromas aparte, ahora te estarás preguntando: ¿Dónde está el negocio? ¿Quién estaría dispuesto a reutilizar ese juguetillo que utilizó un señor con bigote al que no conozco? Pues bien, en realidad es una estrategia de ventas de una tienda on line de juguetes eróticos. Ofrece descuentos a aquellos clientes que reciclen sus juguetes (impulsando a que consuman un nuevo producto, aunque sea con descuento). Para arrancar se centran únicamente en un modelo. ¿Y dónde van a parar los juguetes usados? A un museo británico que se encarga de esterilizarlos y exponerlos.