Funcionalidad. Ese es el objetivo que buscan en cada una de las prendas que han diseñado. Javier Ronda e Israel Romero han lanzado Fulride, marca de ropa de ciclismo de gama alta y de venta exclusivamente online.
“Cada una de nuestras prendas es única. Ha sido concebida y creada técnicamente por unas razones y un objetivo concreto. No hay una extensión de línea innecesaria buscando la máxima oferta estética. La colección es completa y cada prenda individualmente reúne unas características, diseño y funcionalidades exclusivas”, explica Ronda.
Todo el proceso
“Hacemos el producto que a nosotros nos gusta. Son las prendas que nos compraríamos. Cada detalle cuenta. Y cualquiera de ellos son de vital importancia: desde la selección del hilo, pasando por la propia calidad de los tejidos hasta la confección definitiva. Un solo detalle mal escogido puede arruinar por completo una prenda, y nuestro objetivo es seleccionar y educar a nuestros usuarios en la importancia de esa selección”, añade.
Ronda argumenta que “la crisis está provocada en su mayor parte por haber buscado el mejor precio de compra, el producto más atractivo visualmente, sin un control exhaustivo y coherente de todas las partes de la fabricación de una prenda. En Fulride sólo trabajamos con proveedores europeos que son, además, referentes y ofrecen la mejor calidad”.
Más rentables
Con una inversión de 45.000 euros y una previsión de facturación de unos 125.000 euros, Fulride se sitúa en un precio alto, “pero muy competitivos porque al eliminar el punto de venta físico, nuestros precios son entre un 20 y 40% mas baratos que la competencia por calidad”.