Te pones, te pones y para cuando te quieres dar cuenta estás facturando miles de euros al mes y, claro, no tienes más remedio que montar una empresa. “Todo comenzó desarrollando aplicaciones para Android por hobby en tiempos muertos de la carrera. Por pura diversión. Y luego resulta que la gente se los descargaba. Así que pensamos: vamos a hacer algo serio. Desarrollamos primero un programa que detectaba y buscaba la letra de la canción que estabas escuchando. Conseguimos 140.000 descargas en seis meses. Luego desarrollamos otra para usar el chat de Facebook en Android. No había nada de calidad y pensamos que teníamos la capacidad. Conseguimos 50.000 descargas en dos semanas”, recuerda Luis Santos.
Empresas que desarrollen aplicaciones para smartphones y servicios en la nube para dispositivos móviles hay muchas. ¿Por qué escribimos sobre ésta (además de por esas 140.000 descargas en seis meses… ya van por los tres millones y medio de descargas… en diez meses)? “Nos diferenciamos en los pequeños detalles. En ser cuidadosos con los detalles más pequeños de una aplicación. Queremos que el usuario sienta que nuestro producto es algo diferente. Es algo muy sutil, la verdad. Tan sutil como crear burbujas de conversaciones en lugar de tener que ir bajando con el dedo para ver todas las conversaciones. Aunque el negocio está en los heavy users de las aplicaciones, siempre pensamos en nuestras madres cuando desarrollo una aplicación: usabilidad sencilla para quien no sabe nada si no va a quererle sacar más partido, aunque detrás haya más y aunque se le pueda sacar mucho más potencial”, apunta Santos.
“Lo primero de lo que nos dimos cuenta es que con un único producto no vas a ninguna parte. Tienes que tener muchas más patas. Nos planteamos una estrategia para desarrollar varias líneas de negocio. Y tienes que tener un modelo de negocio claro. Los ingresos por publicidad no van mal encaminados. Lanzamos dos versiones de la aplicación del chat de Facebook. Una gratuita con publicidad y otra de pago sin publicidad. La diferencia de ingresos ha sido bestial. Los ingresos por publicidad de la gratuita frente a la de pago se diferencian por un factor de 10. Nuestro cliente es el heavy user. Es el que da dinero. Los ingresos por publicidad van en función del tiempo que se pasa dentro de la aplicación utilizándola”.
¿Competencia? “Muchísima. Mi vecino puede ser competencia. La barrera de entrada es nula. Pagas 25 euros y ya eres desarrollador. Eso supone una ventaja para arrancar en este sector, pero vistas las historias de éxito de muchas empresas hace que mucha gente quiera emularlo. Eso por un lado. Por otro, competimos también contra los más grandes: Apple, Google, Facebook con presupuestos ilimitados. Al menos ilimitados en comparación con nuestros presupuestos”.
“Nos han copiado, pero hemos podido con ellos. Por los pequeños detalles”.