Innovación de producto. El más importante. Puede incluir la creación de una categoría de alimento fruto de la investigación (la angula sintética o gula marcó un hito); un tratamiento inusual que transforma un producto conocido (flores caramelizadas); o la introducción de alimento sin implantación en la cultura gastronómica local (como el consumo de algas).
Innovación tecnológica. Se trata de soluciones que aportan calidad o eficiencia a un determinado producto en cualquiera de sus fases: producción, transformación, logística o comercialización.
Innovación en conservación. Aumentar la longevidad del producto fresco es uno de los objetivos generales. De ahí el éxito de la llamada IV gama (vegetales, frutas u hortalizas preparados sin tratamiento térmico para su consumo directo o cocinado).
Innovación en presentación. Por facilitar la conservación o el consumo, el packaging es uno de los motores de la innovación. En ocasiones la dosificación del producto (por ejemplo en monodosis) también justifica la presentación de nuevas familias de productos.
Innovación en consumo. Los productos de V gama, platos de alta calidad, son el nicho innovador en ascenso. También están en alza aquellos productos de apoyo a la cocina, doméstica o profesional, que permiten acabar las elaboraciones con un toque gourmet.
Innovación en tendencia. La alimentación tiene mucho de moda. El auge de la comida étnica o de los cócteles ha inspirado nuevos proyectos empresariales.
Apoyos y orientación
Todo comienza con una idea. Si la bombilla se ha encendido, debes tener claro que el de la innovación alimentaria es un territorio de colaboración en el que poco se puede hacer solo. Desde el INIA, Manuel Lainez identifica las fuentes de información básicas para empezar a buscar el mejor socio tecnológico para nuestro proyecto:
- Oficinas de Transferencia de Tecnología. Comunican la universidad, la investigación y las empresas. Nos dirigirán al centro de investigación más adecuado.
- Plataformas tecnológicas del sector. Con un funcionamiento similar, pero nacidas de la iniciativa privada, suelen tener una fuerte especialización, por ejemplo en agricultura sostenible o en el vino. Identifica la que mejor acompañe tu idea.
- Foros. Existen tanto presenciales como online. Se trata de una fuente de información básica y práctica ya que reúnen a todos los grupos de investigación del sector para poner en común experiencias y necesidades. Imprescindibles para ponerse al día.
- FIAB. La poderosa Federación Española de Industrias de la Alimentación y Bebidas es sin duda una parada obligada en la búsqueda de información y asesoramiento.