A veces, los grandes emprendedores también sufren baches. Es el caso de Sandra Ortega, la hija mayor del fundador de Inditex, que podría perder hasta 50 millones de euros después de que la justicia haya paralizado uno de sus próximos proyectos, un complejo vacacional de lujo en la costa de Portugal.
Al parecer, la justicia portuguesa ha parado las obras del complejo hotelero porque su ubicación se encuentra en una zona costera protegida. Todo, a pesar de que Sandra Ortega invirtió, a través de su sociedad Rosp Corunna, 50 millones en los terrenos hace siete años. De no levantarse la suspensión, la hija mayor del fundador de Inditex podría perder toda la inversión.
La denuncia contra el proyecto se Sandra Ortega ha sido interpuesta por una asociación local, que defiende que la emprendedora podría poner en peligro la riqueza natural de la zona. “Si sigue adelante el plan urbanístico, esta zona dejará de ser el último gran trozo de costa salvaje de Portugal y tal vez de Europa. Queremos pararlo porque está destruyendo 200 hectáreas de terreno cubierto por especies protegidas”, explicaron en El País.
Sandra Ortega, hija mayor del fundador de Inditex, Amancio Ortega, cuenta con una dilatada carrera como emprendedora e inversora. Sin embargo, al igual que su padre, también cuenta con algunos fracasos en su cartera. En este otro artículo de EMPRENDEDORES, repasamos los más sonados.
Los negocios multimillonarios de Sandra Ortega
El último fracaso de Sandra Ortega no empaña su exitosa carrera como emprendedora. La hija del fundador de Inditex es la segunda persona más rica de España, con un patrimonio estimado en alrededor de 6.300 millones de euros. A pesar de ser hija de Amancio Ortega, Sandra tan solo posee un 5% de la propiedad del grupo Inditex, por lo que ha tenido que emprender por su cuenta para intentar seguir los pasos de su padre.
A través de la sociedad Rosp Corunna, Sandra Ortega gestiona todas sus inversiones: el 5% de Inditex, pero también otro 5% que la empresaria gallega posee de PharmaMar, una biofarmacéutica que quintuplicó su valor durante la pandemia. Además, Ortega es propietaria de otros negocios, sobre todo relacionados con el sector inmobiliario y vacacional, como el complejo portugués que ahora le sitúa en el centro de la polémica.
Por otro lado, la empresaria posee una sociedad de inversión de capital variable (sicav) con más de 300 millones de euros, Soandres. Está gestionada por JP Morgan y su sede se encuentra en el Paseo de la Castellana de Madrid. Sumado a estos tres negocios -sin contar su participación en Inditex-, Sandra Ortega también cuenta con una sociedad inmobiliaria, Ferrado Inmuebles, que cuenta con multitud de edificios repartidos por todo el mundo.
Pero Ortega también tiene hueco en su cartera para emprender en un sector por capricho, como la jardinería. La emprendedora cuenta con varios negocios en este sector, aunque en los últimos ejercicios han dejado pérdidas de alrededor de hasta 100.000 euros. A pesar de eso, los últimos años han sido muy positivos para sus empresas, que generan alrededor de 200 millones de euros anuales, una cifra que sirve para colocar a Sandra Ortega como la segunda fortuna del país, solo superada por la de su padre.
