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01 Abr, 2023

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Haz frente a los morosos

La morosidad crece. Y aunque sea un problema ante el que cualquier empresa debe estar bien protegida en todo momento, en épocas de crisis como la actual, prevenir los impagos debe convertirse en un aspecto prioritario.

Los datos hablan por sí solos: la tasa de morosidad se ha duplicado en el último año. Según las últimas cifras publicadas por el Banco de España, los impagos de bancos y cajas se sitúan en el 1,61%, el registro más alto desde 1999.
Pero no sólo las entidades financieras se ven afectadas: la morosidad perjudica también a las empresas. Ante ella, la mejor fórmula es controlarla en todo momento, y es que siempre resultará más rentable prevenir que tener que curar. ¿Cómo hacerlo? Ten en cuenta los siguiente consejos prácticos:

  • Obtén información previa de cada cliente. No te fíes del sexto sentido: documéntate sobre cada uno de ellos. En caso de duda sobre su solvencia, solicita garantías adicionales, como una fianza bancaria o avales.
  • Fija normas de pago según el tipo de mercado o servicio: prepagos para perecederos, adelantos en gastos soportados con terceros, pagos parciales de honorarios por anticipado, aplazamientos con afianzamiento…
  • Documenta las transacciones: contratos, albaranes, órdenes de compra firmadas, etc., con firma autorizada.
  • En caso de pymes, detrás de cada empresa hay un emprendedor: analiza su trayectoria en empresas y cargos anteriores.
  • Controla permanentemente que los clientes no sobrepasen sus límites de riesgo, y haz un seguimiento de los clientes habituales en sectores o situaciones de alto riesgo. Cuenta asimismo con un buen sistema que facilite información sobre los saldos de los clientes, la antigüedad de los mismos y los posibles retrasos en los pagos.
  • Establece una política de riesgos coherente, y unas políticas de crédito y cobranza que determinen las directrices de cómo la empresa va a conceder y controlar el crédito comercial. Somete también a mayor análisis las excepciones.
  • Establece redes de intercambio de información de morosos dentro del sector (ficheros de morosidad sectorial)
  • Determina límites de riesgo en función de tipologías de clientes: facturación, beneficios, plantilla, antigüedad en la sociedad, actividad, etc.
  • Gestiona conjuntamente la acción comercial y la gestión de riesgos.
  • Fija los objetivos comerciales en ventas netas cobradas, y no sólo en ventas facturadas.
  • Documenta jurídicamente las operaciones comerciales con los clientes.
  • Cuida la calidad documental de facturas y abonos, sin equivocarte en los precios facturados y dando un buen servicio. Evitarás que los morosos tengan una buena excusa para no pagar las facturas.
  • Externaliza. Existen empresas dedicadas a la prevención de la morosidad: con bases de datos, con informes personalizados sobre clientes y deudores, de asesoramiento para evitar los impagos y agencias de detectives privados que investigan la solvencia y antecedentes de los clientes.
  • Detecta las facturas no pagadas y gestiona cuanto antes su cobro. Cada día que se retrasa la gestión, la posibilidad de recobro es menor.