El mercado minorista de mobiliario creció el pasado ejercicio al 18%, hasta los 3.350 millones de euros, con lo que recuperó la cifra de negocio anterior a la pandemia, según el Observatorio Sectorial DBK de INFORMA. “La reactivación del consumo y la inversión, así como el favorable comportamiento del mercado inmobiliario, residencial y terciario, son algunos de los factores que explican el notable crecimiento de los ingresos”.
Todas las familias de producto registraron aumentos de dos dígitos en las ventas, mientras que el segmento de mueble de hogar concentró la mayor parte del negocio (el 71,5% del total, con 2.395 millones de euros), seguido por el de mobiliario de cocina (el 16,1% y 539 millones), el de mueble de oficina (un peso del 8,1% y 271 millones) y otros el de otros muebles, categoría esta última que genera 145 millones de euros.
Como tendencia a subrayar, la penetración en el mercado del canal online se ha ampliado de un modo significativo en los últimos años. “En este sentido, las ventas por internet de muebles, iluminación y artículos para el hogar prácticamente se han triplicado desde 2018”. Un canal, por otro lado, que continuará aumentando su participación en el mercado a corto y medio plazo.
De cara al futuro inmediato, y una vez recuperado el nivel prepandemia, se prevé un aumento adicional del volumen de negocio al cierre de 2022, “apoyado en buena medida en la tendencia al alza de los precios”. En cuanto a la red de puntos de venta, “cabe esperar la apertura de nuevos formatos de tiendas, destacando los establecimientos de proximidad”.
En este escenario favorable, encontramos varias oportunidades en franquicia para emprender, de la mano de marcas consolidadas. Aquí tienes una muestra:
KÜCHENHOUSE
“Negocio sorprendentemente fácil y rentable, donde la central es tu compañero de tienda, aportando valores empresariales como la selección del personal y una formación integral”. Acercan al asociado un “modelo de gestión innovador en sus procedimientos de trabajo, marketing e inversión, junto a un elevado componente tecnológico de creación propia”. Diseñado tanto para el autoempleo como para empresarios con otros negocios, sin que se necesite conocimiento previo del sector, el concepto alcanza el pay–back a los dos años, con una facturación de 500.000 a 800.000 euros. Colaboran con el renombrado chef Martín Berasategui, “que actúa como embajador de marca bajo un contrato de exclusividad absoluta”.
KVIK
En línea con la visión con la que nació –precios bajos sin comprometer el diseño ni la calidad–, la marca lanza soluciones innovadoras para integrar la estética con la funcionalidad y llevar el diseño danés al corazón de todos los hogares. Con el foco en el cliente, han reforzado su experiencia, ofreciendo reuniones gratuitas en la tienda, en su casa o por videoconferencia. Para integrarse en la red es imprescindible poseer bagaje en retail y management. “Y también es conveniente experiencia en el sector de cocinas”, recuerdan desde una central que ha sellado acuerdos con Banco Sabadell y BBVA. “Aconsejamos poseer 100.000 euros en recursos propios, mientras el pay-back es de media a los tres años y la facturación es de 1,8 millones de euros”.
MOBALPA
Pioneros en franquicia –iniciaron el proyecto en los setenta–, realizan de forma interna el diseño, producción y distribución, “una ventaja competitiva real, pues la mayoría de firmas del sector no abarca las tres actividades”. Respecto a la oferta, la gama de medidas, colores y materiales es muy amplia, como subrayan desde una firma que trabaja en línea con las exigencias de sus muebles: estética, ergonomía y a medida. Para tejer su red, seleccionan a emprendedores apasionados por el mundo del comercio al por menor, con experiencia en venta al consumidor final. “Y comprobamos que hayan atesorado liderazgo para dirigir a un equipo de vendedores”. La facturación es de 1 millón de euros y el pay–back a cuatro años.