El aumento del número de jóvenes que ni estudian ni trabajan –la llamada generación de los ‘ninis’– es una de las grandes preocupaciones en términos laborales dentro de las grandes economías europeas. Un problema para el que el sistema educativo inglés parece haber encontrado una solución eficaz.
Al parecer, la clave para reducir el porcentaje de ‘ninis’ se encuentra en el sistema educativo. En el caso británico, su Gobierno ha decidido poner en marcha el método del investigador John Holman, que busca orientar a los alumnos hacia la vida laboral desde la educación básica obligatoria.
El modelo de John Holman para reducir la tasa de ‘ninis’ en la economía
La fórmula de John Holman para reducir la tasa de ‘ninis’ no es tan complicada como puede parecer. En realidad, se trata de formar al profesorado de los centros educativos básicos para que incluyan contenidos relacionados con el ámbito laboral en sus asignaturas, dependiendo de cada materia.
“Se trata de hacer un mejor uso de la información sobre el mercado laboral y las habilidades que se necesitan, o saber cuánto podrían pagarles. No es justo que el destino de los jóvenes siga dependiendo de la información que manejan sus padres o de los contactos que estos tienen en las empresas y el acceso privilegiado a la información”, explica el investigador británico.
El País expone un caso en un reciente reportaje. Se trata de un instituto de Reino Unido que ha puesto en marcha la fórmula para reducir el porcentaje de ‘ninis’. Durante la clase de Lengua, los alumnos se dedican a analizar el lenguaje que se utiliza en las ofertas de trabajo, y a debatir sobre los puestos más interesantes en términos laborales. Es solo un ejemplo de las múltiples actividades que pueden realizarse para reorientar a los jóvenes hacia el mercado de trabajo.
Además, el método de Holman incluye la designación de un “líder de carreras” entre el profesorado, que queda encargado de planificar las diferentes acciones enfocadas a reducir el número de ‘ninis’ entre su exalumnado. Este profesor queda liberado de algunas horas de docencia, a cambio de recibir formación específica y contactar con el ecosistema de empresas locales para fomentar las prácticas entre los más jóvenes.
Un modelo viable en España
El método del sistema educativo inglés para reducir la tasa de ‘ninis’ ha resultado todo un éxito. Solo en 2022, los centros que han conseguido aplicarlo han reducido la tasa de exalumnos que no estudian ni trabajan en un 9,7%. Una cifra que podría ser aún mayor, y que también podría tener su peso en el mercado laboral español.
Más aún, teniendo en cuenta que España cuenta con una tasa de ‘ninis’ del 19,9%, solo superada por Italia y lejos de la media europea, que se sitúa en el 13,3%. Esta cifra, sumada a la crisis de talento que amenaza el mercado laboral español, hace imprescindible que las administraciones tomen medidas para reducir el porcentaje de alumnos que ni estudian ni trabajan.
Sin embargo, para que el modelo inglés triunfe, es necesario un aumento de la inversión pública. En este contexto, cabe destacar que la ratio de orientadores por alumno en España es cuatro veces superior a la recomendada por la Unesco, que aconseja contar con un profesional de este tipo por cada 250 alumnos.